No hay cambios ni "términos extendidos". Chevron Corp seguirá operando en Venezuela con las mismas condiciones según decisión del Departamento del Tesoro de los EEUU.
Mario Beroes/El Político
En lo que queda de mayo el Departamento del Tesoro de Estados Unidos renovará la licencia de Chevron Corp. para operar en Venezuela.
Eso si, sin que la petrolera haya conseguido una extensión de los términos con que opera en el país, según reportó la agencia Reuters.
Biden endurece los términos
El único productor de energía de Estados Unidos en Venezuela pidió en marzo al gobierno del presidente Joe Biden una licencia que le permitiera una mayor participación en sus empresas conjuntas con la estatal venezolana PDVSA.
Esto puede considerarse un primer paso para reactivar la producción y controlar el destino del petróleo venezolano, actualmente escaso y de pésima calidad.
Sin embargo, la administración estadounidense ha decidido que la licencia se renueve tal como está, o que vuelva a algunos de los términos que tenía en 2020.
Estos términos incluyen que no había límites a la perforación, el procesamiento o el envío de petróleo desde Venezuela, según Reuters.
Sin diálogo en México no hay renovación
Funcionarios estadounidenses están ahora a la espera de que Venezuela ponga fecha a la reanudación del diálogo político con la oposición gubernamental.
Esto es considerado un posible factor determinante en la elaboración de la licencia de Chevron.
Las conversaciones políticas, que se celebrarán en México, aún no se han formalizado, y la licencia de Chevron expira el 1 de junio.
Muchas presiones
A medida que el gobierno del presidente Biden busca alentar el diálogo político, se ha enfrentado a las críticas de los republicanos.
También ha enfrentado algunos de sus correligionarios demócratas que no quieren dar a Maduro ninguna concesión.
Al mismo tiempo, el gobierno estadounidense está cada vez más preocupado por el aumento de los precios de los combustibles y el temor a la falta de suministros internos.
La oposición del Congreso a cualquier medida que se considere como una relajación de las sanciones ha eliminado las perspectivas de dar a Chevron en este momento el control sobre la producción o una luz verde para el comercio.
El senador estadounidense Bob Menéndez, presidente demócrata de la Comisión de Relaciones Exteriores, dijo que dar a Maduro “un puñado de dádivas inmerecidas” para que su gobierno prometa sentarse en una mesa de negociación era “una estrategia destinada a fracasar”.
Entre 2019 y 2020, Chevron fue autorizada por el gobierno del entonces presidente Donald Trump a comercializar el crudo producido por sus empresas conjuntas venezolanas para pagar los dividendos y la deuda de PDVSA.
Los privilegios fueron retirados como parte de la campaña de presión de Trump contra Maduro.
Chevron dijo que lleva a cabo sus negocios “en cumplimiento del marco actual de licencias” y sigue siendo “una presencia constructiva en Venezuela”.
Estados Unidos reconoce al líder opositor Juan Guaidó como el legítimo presidente interino de Venezuela y considera la reelección de Maduro en 2018 como una farsa.
Pero el presidente socialista sigue en el poder.
PDVSA y el Departamento del Tesoro de Estados Unidos no respondieron a las solicitudes de comentarios.