Mariano Rajoy, presidente electo de España, tomará como medidor de gobernabilidad la aprobación del presupuesto nacional, tras las posibilidades de recortes de gastos previstos por partidos opositores al nuevo gobierno.
Stephanie Lozada Madriz /El Político
Uno de los requisitos para Rajoy ser aceptado es la presentación de cuestas ante el congreso, donde la tendencia en apoyo a la investidura fue mixta.
"Es la primera bola de partido que debemos salvar. Si la bola se pierde, la legislatura podría embarrancar nada más empezar a andar, porque un rechazo a los Presupuestos es de hecho una censura al Gobierno, afirman diputados de PP.
Por su parte, el diputado opositor, Juan Carlos Girauta afirmó que no va a haber recortes. "Lo que va a haber es un incremento de los ingresos", sentenció.
Rajoy afirmó en el debate de investidura la participación de los sindicatos sigue siendo elemento clave para impulsar la recuperación de la economía española.
resaltó que su labor es tratar de unificar todo los actores sociales en la nueva política económica, sin sacrificar la sostenibilidad de las pensiones.
Con información de ABC