La candidata demócrata a la Presidencia de EE.UU., Hillary Clinton, prometió hoy que si llega a la Casa Blanca impulsará reformas para que los negros dejen de "temer" a la Policía, pero también juró ser implacable contra cualquiera que cometa violencia contra los agentes de seguridad.
"Esta locura tiene que acabar", dijo Clinton sobre el asesinato este domingo de tres policías tras ser emboscados por un individuo en Baton Rouge (Luisiana), diez días después de que otros cinco agentes perdieran la vida en un ataque en Dallas (Texas).
Clinton dio un discurso en la convención anual de la principal asociación de personas negras del país, la Asociación Nacional para el Avance de las Personas de Color (NAACP, por su sigla en inglés).
Sus primeras palabras las dedicó a condenar el suceso del domingo en Baton Rouge y a subrayar que el país tiene "un trabajo difícil, doloroso y esencial por delante para reparar los vínculos entre la policía y las comunidades".
"Matar a agentes de policía es un terrible crimen (…). Si los atacas, nos atacas a todos nosotros. Como presidenta, utilizaré todo el peso de la ley para asegurarme de que los que los maten respondan ante la Justicia. No puede haber justificación" para esos actos, afirmó Clinton en la convención de la NAACP, que se celebra en Cincinatti (Ohio).
Aunque aseguró que garantizar la "seguridad" de los Policías será "su prioridad como presidenta", admitió que muchos afroamericanos como los que la escuchaban en la convención están frustrados también por los casos de asesinatos de negros por parte de agentes de la ley.
"Muchos negros temen a la Policía", reconoció la exsecretaria de Estado.
"Tenemos que reformar nuestro sistema de justicia criminal, porque todos somos más seguros cuando hay respeto a la ley y cuando todo el mundo es respetado por la ley", añadió.
Clinton aseguró que hay "pruebas claras" de que los negros mueren a manos de la policía mucho más a menudo que otros grupos, y que es probable que reciban sentencias más duras que los blancos por cometer los mismos crímenes.
"Algo está profundamente mal. No podemos ignorarlo, no podemos confiar en que se resuelva solo, tenemos que corregirlo", sostuvo Clinton, y defendió que para ello no valen "medidas descafeinadas".
"Empezaré a actuar en este tema desde el primer día (de mi Presidencia) y seguiré en ello cada día. Cuando los medios dejen de prestar atención, yo no lo haré", garantizó.
La aspirante demócrata a la Casa Blanca, que ya había condenado el ataque de Baton Rouge en un comunicado el domingo, subrayó además la necesidad de "luchar por reformas de sentido común para acabar con la violencia armada".
Clinton también criticó al que será su rival en las elecciones de noviembre, el aspirante republicano Donald Trump, por no aceptar la invitación de hablar en la convención de NAACP.
"Mi rival puede tener una opinión diferente, pero yo no querría estar en ningún otro lugar que no fuera aquí, con todos ustedes", apuntó en referencia a Trump, que se encuentra en el mismo estado, en la localidad de Cleveland, con motivo de la convención republicana en la que se le nombrará candidato del partido.
Con Información de Terra