Israel ha mantenido una posición equidistante ante la invasión rusa a Ucrania, pero los voceros de Putin no se detienen, y atacan cuanto no se les someta incondicionalmente.
El Político
Es así como el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, dio una declaraciones a una televisión italiana, el domingo que ha causado un auténtico revuelo en Israel.
No significa nada que Zelenski sea judío, Hitler lo era
Serguei Lavrov dijo textualmente: «No significa absolutamente nada que Zelenski tenga orígenes judíos, incluso Hitler los tuvo en mi opinión». Y luego agregó: «Hace tiempo que escuchamos a los sabios judíos decir que los más grandes antisemitas son precisamente los judíos».
Convocado el embajador ruso
Israel ha convocado al embajador ruso en Tel Aviv para pedirle «disculpas y explicaciones» tras las «graves» declaraciones de Lavrov, definidas como «imperdonables e indignantes» por el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Yair Lapid: «Esperamos que Lavrov se disculpe por la comparación de la sangre judía de Zelenski y Hitler. Los judíos no se suicidaron en la Shoah -añadió Lapid-. El nivel más bajo de racismo contra los judíos es acusar a los propios judíos de antisemitismo». Por su parte, Dani Dayan, presidente de Yad Vashem – el Museo en memoria de las víctimas del Holocausto, en Jerusalén-, ha atacado al ministro ruso: «Las declaraciones de Lavrov son falsas, delirantes, peligrosas y merecen cualquier condena».
Negó la masacre de Bucha
«La verdad es una sola. El 30 de marzo, el ejército ruso abandonó Bucha. Su alcalde declaró la victoria diciendo que Bucha había vuelto a la vida normal. Luego, después de tres días comenzaron a mostrar estos muertos. No quiero entrar en detalles, pero es evidente que es una falsa noticia», afirmó sin sonrojo el canciller ruso
Según el ministro ruso Lavrov, la intención de Moscú no es derrocar a Zelenski: «No estamos apuntando a un cambio de régimen en Kiev; esta es una especialidad de los estadounidenses. Ni siquiera estamos pidiendo que se rinda. Lo que pedimos es que cese las hostilidades y que deje salir a los civiles. Queremos -explicó Lavrov- asegurarnos de que no vengan más amenazas a Rusia de Ucrania».
En la entrevista se abordó el tema que más preocupa a los ciudadanos de todo el mundo: la posibilidad de una guerra nuclear. Sobre esto, el ministro alegó que Occidente tergiversa: «Los medios de comunicación y los políticos occidentales tergiversan lo que dicen las instituciones rusas», agregando que Rusia nunca ha detenido los esfuerzos para evitar una tercera guerra mundial, «pero el riesgo no puede subestimarse».