El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, aseguró esta sábado que en lo que va de año la región de Járkov (norte) sufrió 40 ataques rusos con misiles.
El Político
Rusia se ha convertido, en opinión de Zelenski, en "sinónimo de terror" y "será ejemplo de derrota y justo castigo de este terror".
En detalle
En un discurso a última hora de este sábado, Zelenski dijo que "en menos de dos meses y medio, más de cuarenta misiles enemigos ya han golpeado Járkov. Ruinas, escombros, agujeros de obús en el suelo son un autorretrato de Rusia que pinta donde reina la vida normal sin Rusia", explicó.
"Solo desde principios de este año, en menos de dos meses y medio, más de cuarenta misiles enemigos ya han golpeado Járkov", dijo el mandatario en un discurso vespertino, reportó DW.
Según Zelenski, "el Estado malvado" usa una variedad de armas -"misiles y artillería, drones y morteros"- con un único objetivo: "destruir la vida y no dejar nada humano".
"Ruinas, escombros, agujeros de obús en el suelo son un autorretrato de Rusia que pinta donde reina la vida normal sin Rusia", afirmó.
Entre líneas
Rusia lanzó este jueves un ataque masivo —el más grave en varias semanas— contra una decena de regiones de Ucrania, entre ellas, Lviv (oeste), Odesa y Jersón (sur), Járkov (norte), Dnipropetrovsk (este) y Kiev (centro).
Hubo, al menos, 6 muertos entre Lviv y Dnipró por la ofensiva de madrugada, y otro cuatro en Jersón por disparos de artillería, según las autoridades.
En esta nueva ofensiva se emplearon 81 misiles, seis de ellos son hipersónicos de modelo Kinzhal, y ocho drones bomba, informan fuentes militares.
Rusia recuperó “sus tácticas miserables”, lamentó el presidente Zelenski, tras reconocer que se han visto afectadas infraestructuras críticas y zonas residenciales y que los servicios de emergencia tratan de restablecer el sistema energético. “Los ocupantes solo pueden aterrorizar a los civiles. Eso es todo lo que pueden hacer”, advirtió el mandatario.
En conclusión
Zelenski señaló que los bombardeos rusos acabaron con la vida de tres personas en Jersón (sur) "que simplemente fueron a una tienda a comprar comestibles".
Mientras en Zaporiyia un misil ruso impactó en las instalaciones de soporte vital de la ciudad, en las zonas fronterizas Rusia disparó contra las aldeas "para intimidar a la gente, para ahuyentarla".