El traslado hasta ahora de unos 50 extranjeros desde Texas hacia Washington DC ordenado por el gobernador de Texas, Greg Abbott, preocupa a abogados y organizaciones que defienden los derechos de los inmigrantes.
El Político
No les explican el porqué del viaje, les dicen que es gratis, les hacen creer que es voluntario y cuando llegan a su destino, los dejan literalmente “tirados” en la calle.
El envío de inmigrantes que llegaron a la frontera en busca de asilo (previamente se entregaron a las autoridades federales de inmigración, demostraron tener un caso de asilo, fueron procesados y liberados porque no constituyen una amenaza a la seguridad pública en espera de presentarse ante un juez de inmigración) forma parte de una estrategia de Abbott, un duro opositor de la política migratoria del presidente Joe Biden, reportó Univision.
Inmigrantes de Texas
Abbott culpa al gobierno de la crisis que se vive en la frontera con México y asegura que la mayoría de los inmigrantes que son admitidos en el marco del debido proceso son criminales.
Señala además que, una vez eliminado el Título 42 de los CDC en la frontera a partir del 23 de mayo, se producirá una especie de invasión de extranjeros y que el Estado de Texas “se mantendrá firme en nuestros esfuerzos para llenar los vacíos (generados por el gobierno) y mantener seguros a los tejanos".
Según el gobernador, el traslado de inmigrantes a la capital permitirá al gobierno “satisfacer de manera más inmediata; las necesidades de las personas a las que permite cruzar nuestra frontera”. Pero lo que no dice Abbott es que las autoridades federales están cumpliendo con el debido proceso migratorio; con personas que están llegando en busca de un recurso legal disponible.
Crisis de inmigrantes en Texas
Esta situación amenaza con generar una nueva crisis, porque los inmigrantes liberados por la Patrulla Fronteriza; tomados bajo control de las autoridades de seguridad pública de Texas, subidos voluntariamente a un autobús; y enviados a Washington DC se hace sin supervisión adecuada y sin explicarles detalladamente al extranjero las razones del viaje; y las responsabilidades que asume ante la ley al momento de habérsele permitido entrar con el compromiso de presentarse ante un juez de inmigración.
Fuentes de la Patrulla Fronteriza dijeron estar molestos por la política de Texas. Expresaron temor de que el traslado genere nuevas crisis; y que al final del día sea la agencia federal la que sea culpada por el desorden que los traslados están generando.
También advirtieron que la situación en la frontera es delicada; y que el número de casos que están llegando superar la capacidad de respuesta del gobierno federal. Pero resaltan que se está procediendo conforme el debido proceso migratorio.