El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, no solo viajará a Ginebra para aparecer en la misma plataforma que el mandatario de Estados Unidos Joe Biden; sino porque "el mal estado de las relaciones" entre ambos países exige una cumbre.
El Político
"La razón principal para que vaya es el mal estado de las relaciones entre los dos países. Y un nivel crítico de esta relación que exige una cumbre entre nuestros respectivos países, porque es la única manera… de evitar una mayor degradación de nuestro diálogo", dijo Peskov a CNN el pasado viernes.
La cumbre de la próxima semana en Ginebra se produce en un momento en que las relaciones entre ambas naciones han alcanzado nuevos mínimos en los primeros meses de la administración de Biden.
Diferencias entre Biden y Putin
En abril, Estados Unidos anunció una serie de sanciones drásticas para castigar a Moscú por su injerencia en las elecciones de 2020, su ocupación y sus "graves abusos de los derechos humanos" en Crimea. A Rusia también se atribuye el ciberataque SolarWinds, una de las peores violaciones de datos que ha sufrido el gobierno de Estados Unidos.
El embajador de Rusia en Estados Unidos, Anatoly Antonov, fue retirado de Washington después de que Biden llamara asesino a Putin en marzo. El embajador de Estados Unidos en Rusia, John Sullivan, abandonó Moscú después de que Rusia le sugiriera que volviera a Washington para entablar consultas.
Este miércoles Biden dijo que estaba en Europa para defender el concepto mismo de democracia. Asimismo, advirtió a su homólogo en Rusia que tenía previsto plantear cuestiones delicadas durante su charla. "Me dirijo al G7, luego a la reunión ministerial de la OTAN y después a reunirme con el Sr. Putin para hacerle saber lo que quiero que sepa", dijo Biden citado por CNN.
La cumbre Biden-Putin
En medio de las diferencias entre ambas naciones, Peskov considera que la cumbre será "una muy buena oportunidad" para ventilar las preocupaciones de ambos países.
Temas sobre la mesa
Una cuestión delicada que Biden puede esperar plantear es la del crítico del Kremlin Alexey Navalny, encarcelado a principios de este año por violar supuestamente los términos de la libertad condicional de un caso de 2014. Sin embargo, Peskov dijo a CNN que Putin no tenía previsto abordar con Biden el tema de Navalny. Al respecto, el portavoz del Kremlin dijo que no es un tema para la agenda de las relaciones bilaterales.
Para Biden, el objetivo de la cumbre de Ginebra es facilitar una relación diplomática más estable y predecible con Rusia. Pero su administración mantiene bajas sus expectativas para la reunión, y ha atenuado las sugerencias de que Estados Unidos y Rusia salgan de la reunión con algún acuerdo innovador.
La conversación del próximo miércoles probablemente será tensa para ambos líderes, ya que se espera que la agenda incluya los ciberataques, las violaciones de los derechos humanos y las acciones de Rusia en Ucrania, según funcionarios de Estados Unidos.
A pesar del deterioro de las relaciones entre ambos países en temas como Ucrania y la injerencia electoral, Biden espera establecer un canal de comunicación claro que evite sorpresas indeseadas.
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