Venezuela, Brasil y Ecuador fueron los paises que recibieron millonarios sobornos de una importante empresa de EEUU de asfalto que aceptó pagar 16,6 millones de dólares en multas al declararse culpable el martes de delitos federales.
El Político
La empresa Sargeant Marine Inc. a través de dichos sobornos con PDVSA y Petrobras pudo obtener lucrativos contratos durante casi una década trayendo materias primas a América del Sur.
Según la fiscalía federal en Brooklyn, Sargeant Marine y sus filiales pagaron sobornos entre 2010 y 2018 por contratos con petroleras estatales en tres países suramericanos, todos con gobiernos de izquierdas en esa época.
20 Minutos reportó que la compañía con sede en Boca Ratón, Florida, consiguió más de 38 millones de dólares en beneficios como resultado de los sobornos.
La mayor parte de los beneficios se obtuvieron en Brasil, donde se sobornó a un congresista, un ministro y altos directivos de la estatal Petrobras durante los gobiernos del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva y su sucesora, Dilma Rousseff.
Ninguno de los funcionarios extranjeros aparece citado por su nombre en la declaración de culpabilidad, pero la fiscalía brasileña presentó cargos en 2018 contra un excongresista, Candido Vaccarezza, por negociar con Sargeant Marine los sobornos pagados a Petrobras. Vaccarezza era entonces líder del Partido de los Trabajadores en la cámara baja brasileña.
Documentos judiciales desclasificados hace poco indican que Daniel Sargeant, que dirigió Sargeant Marine durante una época, se declaró culpable el pasado diciembre de conspiración para lavado de dinero e incumplir la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero, que prohíbe a las empresas estadounidenses pagar a funcionarios extranjeros a cambio de obtener negocio. El exdirectivo está a la espera de sentencia después de pagar 300.000 dólares de fianza.
La compañía era "uno de los mayores proveedores de asfalto del mundo", según los documentos judiciales. Pero ahora es una sombra de lo que fue, tras un proceso de venta de activos que siguió a una larga y agria batalla legal entre Sargeant y su hermano mayor, Harry Sargeant III, por el control de la firma fundada por su padre.
Este mes, un exdirectivo de la venezolana PDVSA que estuvo a cargo de las ventas de asfalto fue detenido en un caso relacionado, elevando a siete el número de funcionarios venezolanos y directivos, operadores y agentes de Sargeant Marine.