Uruguay persigue "crecer porcentualmente en los ingresos" y no en número de visitantes para defender la responsabilidad en el sector turístico, según el viceministro uruguayo del sector, Benjamín Liberoff.
"Hay que estar muy pendientes de no saturar un destino con determinadas características, ya que si uno viola esos factores motivacionales por los que los turistas vienen, va a matar la gallina de los huevos de oro", afirma Liberoff en una entrevista con Efe en Madrid previa a su participación en la feria World Travel Market (WTM) de Londres, del 7 al 9 de noviembre.
Como ejemplo menciona que su país, cuyo lema es "Uruguay Natural" por, entre otros aspectos, la calidad de sus playas, uno de los puntos fuertes de su oferta turística, pasó en los últimos 12 años de 2,1 a 3 millones de visitantes mientras que los ingresos casi se cuadruplicaron: de 540 a 2000 millones de dólares.
"El énfasis lo ponemos en lograr una mejor calidad de servicio que conlleve un gasto mayor y, por eso, desde la Administración consideramos que hay que crecer más porcentualmente en los ingresos que en el número. No es duplicar los turistas para duplicar los ingresos", explica.
Las autoridades turísticas del país suramericano han trabajado en los últimos años en diversificar la oferta, que ahora incluye, entre otros, circuitos de gastronomía y enología, celebración de convenciones o recorridos culturales.
Una de las principales novedades, en coordinación con los cinco departamentos (provincias) bañados por el río Uruguay (Artigas, Río Negro, Salto, Paysandú y Soriano), es la potenciación del denominado Corredor de los Pájaros Pintados -bautizado así por el significado en guaraní de la vía fluvial-, que cuenta con fondos de ayuda del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
"Podría decirse que hay un 10 por ciento hecho y un 90 por hacer", reconoce Liberoff sobre las infraestructuras necesarias para convertir en foco de atracción turística el río que da nombre al país como vía navegable y de explotación de emprendimientos locales.
No obstante, la reciente declaración como Patrimonio de la Unesco del Frigorífico Anglo, en Fray Bentos, cuyos productos cárnicos -en especial sus latas de "corned beef"- dieron la vuelta al mundo, favorece este proyecto.
Liberoff adelantó dos asuntos que centrarán la presencia de su país en la Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur) en 2017: la aspiración a una candidatura conjunta Argentina-Uruguay para la organización del Mundial de fútbol 2030 -que supone el centenario de la cita deportiva- y la creación de una ruta jesuítica.
"Los Mundiales de fútbol y los Juegos Olímpicos son las dos mayores operaciones turísticas de la humanidad", declara el viceministro uruguayo, quien explica que si se ratifica la presentación de la candidatura conjunta de Argentina y Uruguay, los dos finalistas del primer Mundial de la historia (1930), "los volúmenes de inversión hay que irlos organizando con tiempo".
"Creemos que Fitur es una gran vidriera" para exponer este proyecto, en el que ya colaboran "una comisión en ambos países y un grupo de trabajo conjunto", señala Liberoff, quien afirma que entre el Ejecutivo del presidente uruguayo Tabaré Vázquez y el del argentino Mauricio Macri "se ha ido construyendo una confianza bien interesante".
También la creación de una ruta jesuítica, que englobe los restos de lo que fueron las misiones españolas en Paraguay, Argentina, Uruguay y Brasil, y la celebración del centenario del estreno en Montevideo, el 19 de abril de 1917, de "La Cumparsita", considerado el tango más famoso del mundo y, a su vez, himno oficioso de Uruguay, marcarán los próximos objetivos turísticos del país suramericano.
Con información de EFE