Unas 500 venezolanas cruzaron ayer a la ciudad colombiana de Cúcuta, a pesar del cierre de la frontera común, para comprar alimentos ante la escasez que se vive en su país.
Las mujeres llegaron a Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, procedentes de la vecina ciudad de Ureña, después de atravesar el puente internacional Francisco de Paula Santander.
Fuentes policiales indicaron a EFE que la situación la manejó directamente el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Un vocero de la Cancillería dijo que un funcionario de ese ministerio fue a Cúcuta a coordinar con ?todas las entidades que tienen que ver con los temas fronterizos? para encontrar soluciones.
La canciller colombiana, María Ángela Holguín, tiene previsto viajar hoy a esa ciudad para hablar con las autoridades locales.
Desde el cierre de la frontera, centenares de ciudadanos colombianos que vivían en el lado venezolano de la frontera fueron expulsados y varios miles regresaron por su cuenta para no correr la misma suerte.
Pese a esto, la circulación de personas y mercancías continúa a menor escala por pasos ilegales, y según autoridades, en las últimas semanas se han presentado otros casos similares al de ayer en algunos de esos puntos irregulares.
Imágenes que han circulado en medios locales y redes sociales muestran a las mujeres venezolanas, algunas vestidas de blanco, cuando cruzaban el paso fronterizo de Cúcuta en medio de una algarabía y al grito de ?sí se puede?, por la posibilidad de comprar víveres, sin que los autoridades de su país lograran impedirlo.
Antecedente La porosa frontera terrestre entre Colombia y Venezuela, de 2.219 kilómetros de largo, fue cerrada en agosto del año pasado por orden del presidente venezolano, Nicolás Maduro, como parte de una campaña contra el contrabando y presuntos paramilitares que operan en la zona, según la explicación oficial.
Con Información de: El Tiempo