La Unión Europea (UE) aumentó su previsión de crecimiento para España a 5,9% este año, tres décimas más de lo estimado en el mes de febrero. Según Bruselas, la economía española se acelerará el segundo semestre del año con el proceso de vacunación y la llegada de fondos europeos.
El Político
La Comisión Europea estima que las ayudas comunitarias impulsarán la economía de España un 6,8%, cifra superior al 5,3 previsto hasta el momento. Se trata de la expansión más alta de todo el bloque, que en conjunto crecerá 4,2% este año. Asimismo, Bruselas prevé un crecimiento de 4,4% para la Unión Europea para el año que viene, reseña El País de España.
Con estas previsiones, a finales de 2021 España recuperará el Producto Interno Bruto (PIB); esto supondría un año de retraso con relación a la Unión Europea.
Recobrando el optimismo
Luego de que en el primer trimestre del año entrara en recesión, la economía europea comienza a recobrar optimismo. El ritmo de vacunación del bloque logró superar al de Estados Unidos y Reino Unido; y pese a que la economía sigue detrás de Washington y Pekín, se cree que puede recuperarse.
Contribuirán en esta recuperación las ayudas masivas que empezará a enviar el bloque a las capitales en verano; sobre estas, se estima que tengan un impacto equivalente al 1,2% del PIB de aquí a finales de 2022. De hecho, Bruselas prevé un fuerte impulso de la inversión pública en 2022 del 3,5%, de modo que alcanzará su mayor impulso desde 2010.
España al frente de la UE
Tras la estrepitosa caída de 10,8% en 2020, la economía española liderará el crecimiento de la eurozona debido al levantamiento de las restricciones. También impulsa esta expansión la llegada de 34.750 millones de euros de los fondos europeos entre este año y el próximo; así como la implementación de las reformas comprometidas.
Las estimaciones de la UE adelantan la recuperación del PIB de España previo al estallido de la pandemia del Covid-19. Según las nuevas estimaciones del bloque, sería a finales de 2022 y no en 2023 como estaba previsto.
El momento en que las economías recuperarán el nivel anterior a la pandemia es clave para decidir si la Unión Europea mantiene suspendidas las reglas fiscales el año que viene. La recomendación de la Comisión Europea es hacerlo; pero países como Alemania piden esperar las previsiones antes de tomar una decisión al respecto.