Los referendos, que Rusia y sus aliados occidentales consideran amañados, se celebran en las regiones bajo control ruso de Luhansk y Jersón y en las zonas ocupadas de las regiones de Donetsk y Zaporiyia.
El Político
Dichos referendos están ampliamente considerados como un pretexto para una anexión y se espera que las autoridades rusas anuncien las regiones como propias cuando termine la votación el martes.
El Kremlin ya ha empleado esta estrategia antes. En 2014 celebró un apresurado referendo en la región ucraniana de Crimea para justificar la anexión de la península del Mar Negro, una operación tachada de ilegítima por la mayor parte de la comunidad internacional.
Referendos en zonas invadidas por Rusia
Las autoridades ucranianas han dicho a los habitantes de las cuatro regiones ocupadas por Rusia que enfrentarían procesos penales si votaban, y les recomendaron que se marcharan, reportó LA Times.
Muchos ucranianos huyeron de esas regiones antes de que comenzaran los referendos, por miedo a verse obligados a votar o quizás reclutados por el ejército ruso.
Petro Kobernik, que salió de la ciudad bajo control ruso de Jersón justo antes de que comenzaran las votaciones, dijo que la perspectiva de vivir bajo la ley rusa y con una guerra en aumento hacía que él y otras personas miraran al futuro con enorme preocupación.
Rusia moviliza más tropas
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, que empezó a movilizar más tropas para la guerra la semana pasada, dijo que estaba dispuesto a utilizar armas nucleares para proteger territorio, una clara amenaza para que Ucrania detenga sus intentos de recuperar las regiones.
La retórica cada vez más agresiva de Putin y su decisión, políticamente arriesgada, de llamar a filas hasta a 300.000 reservistas llegaron después de que las tropas rusas se vieran obligadas a retirarse con rapidez de amplias zonas del nordeste de Ucrania este mes. Una feroz contraofensiva ucraniana continúa en el este y el sur del país.
El gobernador nombrado por Moscú en la región sureña de Jersón, Vladimir Saldo, prometió que los intentos ucranianos de sabotear el referendo con ataques contra la ciudad no tendrían éxito.