La Autoridad de Gestión de Desastres y Emergencias (AFAD) informó este domingo que Turquía concluyó las operaciones de rescate tras el sismo, manteniendo solamente dispositivos en las dos provincias más golpeadas por el terremoto que dejó decenas de miles de muertos.
El Político
«En muchas de nuestras provincias, las búsqueda y los rescates han concluido. Siguen las tareas en las provincias de Kahramanmaras y Hatay», dijo el director del organismo, Yunus Sezer, a los periodistas en Ankara.
¿Por qué es importante?
El terremoto de magnitud 7,8, y cuyo epicentro fue en Kahramanmaras, sacudió la zona el 6 de febrero. Hasta la fecha ha dejado más de 46.000 muertos en Turquía y la vecina Siria, según el último balance difundido este domingo por la AFAD, reportó ElNacional.
El vicepresidente turco Fuat Oktay informó por su parte que 105.000 edificios se derrumbaron o quedaron muy dañados, por lo que serán arrasados.
Tres personas, entre ellas un niño, fueron encontradas con vida bajo los escombros el sábado en la provincia de Hatay, en el sur de Turquía, 13 días después del terremoto, según informó la prensa local.
Uno de ellos, sin embargo, murió en los minutos posteriores al rescate, agregó la cadena privada NTV.
Los otros dos, uno de ellos un niño, sacados de entre los escombros 296 horas después del sismo, fueron trasladados al hospital. La edad y la identidad de los rescatados se desconocen de momento.
Entre líneas
Las labores de rescate corrieron a cargo de equipos de socorro turcos y kirguises, según medias turcos.
Otro rescatado, un hombre de 45 años, había sido encontrado el viernes en la noche, 278 horas después del sismo, en la provincia de Hatay, cerca de la frontera con Siria, donde se encuentra la ciudad de Antakya, que quedó completamente destrozada.
En contexto
Turquía suspendió las labores de rescate en algunas regiones. El gobierno de Siria tomó la misma medida en las zonas que están bajo su control.
La mayoría de los fallecidos se concentra en Turquía.
Lamentablemente, la esperanza de encontrar sobrevivientes se ha desvanecido ampliamente.
Por su parte, el presidente turco, Tayyip Erdogan, rechazó las acusaciones según las cuales su gobierno fracasó en dar respuesta al desastre natural más mortífero del país en los últimos tiempos.
En conclusión
El terremoto de magnitud 7,8 que asoló el sureste de Turquía y la vecina Siria deja más de 46.000 muertos y al menos un millón de personas sin hogar. Además, se espera que el costo económico del desastre ascienda a miles de millones de dólares.
Muchos en las zonas afectadas enfrentan una emergencia paralela conforme tratan de recoger sus pertenencias en medio del frío extremo, sin comida, agua o sanitarios, aumentando las posibilidades de que el desastre escale por cuenta de las enfermedades.
“Las necesidades son enormes, la gente está sufriendo y no hay tiempo que perder”, alertó el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, en un comunicado, donde solicitó fondos para socorrer a las víctimas.
Aseguró que las contribuciones darían alivio por tres meses a 5,2 millones de personas.
El dinero “permitiría a organizaciones de ayuda aumentar rápidamente el soporte vital” en áreas como la seguridad alimentaria, protección, educación, agua y refugio, añadió.
Por su parte, la Fiscalía estableció una unidad especial para investigar posibles negligencias en la construcción y el vicepresidente turco, Fuat Oktay, informó de que se han dictado 113 órdenes de detención, algunas de ellas destinadas a constructores sospechosos de eliminar pilares para ganar espacio en las viviendas.