Como presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump inició estos días sus contactos con colaboradores cercanos a la líder del Frente Nacional (FN) francés, Marine Le Pen, y con el líder del británico UKIP, Nigel Farage, con quien mantuvo una reunión este sábado en su torre de Nueva York.
La que fuera jefa de campaña del republicano, Kellyanne Conway, informó de la reunión entre Trump y Farage, político ultraderechista y líder del Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP) que hizo una fuerte campaña a favor del "brexit" (la salida del Reino Unido de la Unión Europea) en el referéndum del pasado 23 de junio.
"(La reunión ha sido) muy productiva. Creo que han podido disfrutar de la compañía del otro y, por supuesto, han tenido la oportunidad de hablar de (los conceptos) de libertad y ganar y lo que eso significa para el resto del mundo", indicó Conway a la prensa en la Trump Tower de Manhattan.
Farage, polémico político eurófobo y contrario a la inmigración, tiene una estrecha relación con Trump e incluso participó en un evento durante la campaña para las elecciones presidenciales.
Según los medios británicos, Trump está a favor de impulsar una relación bilateral con la primera ministra británica, Theresa May, muy parecida a la que disfrutaron el expresidente estadounidense Ronald Reagan (1981-1989) y la antigua primera ministra Margaret Thatcher (1979-1990) en los años ochenta.
En lo que respecta a Francia, el millonario estadounidense parece querer reforzar sus lazos con Marine Le Pen, que esta semana calificó como "victoria de la libertad" los resultados electorales de Estados Unidos.
Su sobrina, Marion Maréchal-Le Pen, anunció hoy en Twitter que el ultraderechista Frente Nacional había aceptado una invitación para "trabajar juntos" del jefe de campaña de Trump, Stephen Bannon.
Bannon es el director del portal de noticias de la derecha alternativa Briebart, es miembro del equipo para la transferencia de poderes entre Trump y el Gobierno del presidente, Barack Obama, y suena como posible jefe de Gabinete de la Casa Blanca, un cargo que equivale al de primer ministro en Europa.
A este puesto también podría optar el presidente del Comité Nacional Republicano, Rience Priebus, el principal aliado del presidente electo durante su accidentada campaña de primarias.
Con información de EFE