Una corte federal de Nueva York ha bloqueado un intento de la Administración Trump por impedir que los inmigrantes indocumentados sean contados en el Censo 2020.
El Político
La Constitución establece que cada persona que vive en el país debe ser censada y es con base en este conteo que se determinan el número de asientos que cada estado recibe dentro del Congreso y también los delegados que cada uno envía al Colegio Electoral, el órgano colegiado que elige al presidente.
Telemundo destacó que la decisión de la corte se produce después de la publicación de un memorando por parte del presidente, Donald Trump, en el que le solicitaba al secretario de Comercio, Wilbur Ross, la información necesaria para excluir del conteo poblacional a las personas indocumentadas.
El panel de tres jueces argumentó que la orden presidencial emitida a fines de julio violaba la ley y que el daño que provocaría duraríá una década.
Los magistrados prohibieron al secretario Ross, cuya agencia supervisa la Oficina del Censo de los Estados Unidos, excluir a las personas en el país de manera ilegal de las cifras del Censo de 2020, que se usará para determinar cuántos escaños obtiene cada estado en la Cámara de Representantes.
Los jueces dijeron que las personas indocumentadas califican para ser contadas en los estados donde residen. Aunque se negaron a determinar si la orden era inconstitucional.
“A lo largo de la historia de la Nación, las cifras utilizadas para determinar la distribución del Congreso –en el lenguaje de los estatutos actuales, la ‘población total’ y el ‘número total de personas’ en cada Estado– han incluido a todas las personas que residen en Estados Unidos al momento del Censo, ya sean ciudadanos o no y si viven aquí con o sin estatus legal”, escribieron los jueces.
Las demandas que desafían la orden presidencial fueron presentadas por una coalición de estados liderada por Nueva York y varios grupos de derechos civiles. La decisión de este tribunal compuesto por un panel de tres jueces podrá apelarse directamente ante la Corte Suprema.
“Esta es una gran victoria para el derecho a votar y los derechos de los inmigrantes”, dijo Dale Ho, director del Proyecto del Derecho al Voto de la Asociación Americana de Libertades Civiles, uno de los grupos que desafió la orden. “El presidente Trump ha intentado y fracasado una vez más en convertir el Censo en un arma contra las comunidades inmigrantes. La ley es clara: cada persona cuenta en el Censo”.