Un centro de vacaciones de la localidad de Saint Hilaire du Rosier, en los Alpes franceses, que debía transformarse en un centro para acoger a inmigrantes fue tiroteado la pasada noche, confirmó la Gendarmería.
El diario "Le Dauphiné Libéré", que fue el primero en revelar la información, mostró en su página web los impactos en una ventana de los perdigones -disparados por un rifle de caza- que rompieron los cristales y deterioraron las persianas.
El periódico añadió que también se encontraron pintadas hostiles a los inmigrantes en las calles próximas a este centro de vacaciones, que pertenece a la compañía eléctrica estatal EDF.
Este ataque se produjo horas antes de una reunión pública programada esta tarde precisamente para abordar la cuestión de la futura llegada de inmigrantes a la localidad con un representante de la prefectura (delegación del Gobierno) del departamento de Isère.
El prefecto, Lionel Beffre, había informado de que se ha decidido ubicar en Isère a 250 de los varios miles de inmigrantes y refugiados (entre 7.000 y 10.000, según las fuentes) que malviven ahora en un campamento cerca del puerto de Calais, conocido como "la Jungla" y que va a ser desmantelado en las próximas semanas.
El martes ya se produjo un incidente similar, al detectarse que otro centro de vacaciones de Saint Brévin, cerca de Nantes (en el oeste de Francia), que también va a reconvertirse en Centro de Acogida y Orientación para los extranjeros de "la Jungla" de Calais, había sido tiroteado.
Esa instalación pertenece igualmente a EDF y está gestionada por el comité de empresa, que ha decidido cederla para recibir allí a refugiados e inmigrantes.
Con información de EFE