El jefe de Estado brasileño, Michel Temer, calificó como "inadmisible" la posibilidad de que la corte electoral lo pueda castigar por supuestas irregularidades cometidas en la campaña en la que acompañó como vicepresidente a Dilma Rousseff.
En una entrevista al canal Globonews, Temer dijo que esta situación es equiparable a culpar de un accidente de tráfico al copiloto del automóvil.
El Tribunal Superior Electoral ha abierto una investigación de las cuentas de la fórmula electoral encabezada por Rousseff en 2010, en las que Temer era candidato a vicepresidente, y si considera que cometió un delito, podría cancelar las elecciones y cesar al actual jefe de Estado.
Esta corte ordenó hoy violar el secreto de las cuentas bancarias de tres empresas gráficas que fueron contratadas para la campaña electoral.
Esas tres gráficas no presentaron documentos que comprobaran, en su totalidad, los servicios supuestamente prestados a la fórmula liderada por Rousseff.
Las sospechas sobre la posible financiación ilegal de la campaña se sostienen en las declaraciones de empresarios que han sido condenados por su participación en el escándalo de corrupción que gira en torno a la petrolera Petrobras.
Los abogados del actual presidente, quien milita en el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), han tratado de deslindar a Temer del caso porque las acusaciones están dirigidas contra recaudadores del Partido de los Trabajadores (PT), fuerza de Rousseff.
Temer asumió la Presidencia el pasado agosto después de que Rousseff fue destituida en un juicio político en el que fue hallada culpable de unas irregularidades en el manejo de las cuentas públicas.
Con información de EFE