La tasa de desempleo en EEUU bajó una décima en abril y se situó en el 3,4 %, según datos publicados este viernes por la Oficina de Estadísticas Laborales.
El Político
En el cuarto mes del año se crearon 253.000 empleos netos, 17.000 más que en marzo, en un momento en el que se analizan de cerca los efectos que están teniendo en el mercado laboral las subidas de tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) para frenar la inflación, reportó FinanzasDigital.
El desempleo volvió a bajar, por segundo mes consecutivo, después de la leve subida que registró en febrero y que parecía indicar que las subidas de las tasas de interés estaban enfriando el mercado laboraL.
Panorama general
La Reserva Federal subió los tipos de interés un cuarto de punto, hasta dejarlos en una banda que va del 5% al 5,25%.
Es el nivel más alto desde septiembre de 2007. Pero ésa no es la noticia. Lo relevante es que, al anunciar la decisión, la ‘Fed’ ha declarado que, en el futuro, a la hora de decidir los tipos de interés, "tomaremos en consideración el impacto acumulativo del endurecimiento de la política monetaria, el retraso con el que la política monetaria afecta a la actividad económica y a la inflación, y los acontecimientos económicos y financieros".
Es una frase parecida a la que empleó el banco central en 2006, cuando terminó el último gran ciclo alcista de los tipos de interés.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, celebró el dato y afirmó, a través de un mensaje en redes sociales, que refleja que su plan de “invertir” en Estados Unidos “está funcionando”.
We just learned we created 253,000 jobs in April.
That's 12.7 million jobs since I took office, an unemployment rate that is the lowest since 1969, and the highest share of working age people in the workforce since 2008.
My plan to invest in America is working.
— President Biden (@POTUS) May 5, 2023
¿Porqué es importante?
La Reserva Federal de EEUU votó unánimemente para aumentar las tasas de interés en un 0,25% este miércoles. Este es el décimo incremento que el banco central aprueba desde que comenzó su batalla contra la inflación en marzo del año pasado.
La medida ocurre en medio de la fragilidad actual que atraviesa el sector bancario a raíz, en parte, de las tasas de interés más altas y del colapso de tres bancos regionales. Los mercados ya anticipaban la subida de las tasas.
El aumento de un cuarto de punto lleva que la tasa de fondos federales de referencia pase de un nivel de 5% a 5,25%, el más alto en más de 15 años.
Eso supone que, por el momento, EEUU deja de subir los tipos de interés, a no ser que cambien las circunstancias. El ciclo alcista del precio del dinero iniciado hace quince meses, así pues, ha concluido.
Ahora toca un periodo de examen de la situación, que probablemente se prolongue al menos tres meses, hasta que la Reserva Federal adopte una postura más clara.
En su última reunión, en el mes de marzo, los miembros del Comité Federal del mercado Abierto (FOMC, según sus siglas en inglés), que es el órgano de la ‘Fed’ que decide la política monetaria, señalaron que los tipos de interés no subirían más allá del 5,1%. Ése es el nivel al que están ahora.
Sin embargo, los datos de abril siguieron confirmando la solidez del mercado y la cifra neta de creación de empleo está en sintonía con las registradas en los últimos meses.
Así, el empleo de nómina no agrícola total aumentó en 253.000 en abril, en comparación con el aumento mensual promedio de 290.000 durante los 6 meses anteriores.
En contexto
En total, 5,7 millones de estadounidenses se encontraban sin empleo a finales de abril, un mes en el que el empleo siguió mostrando una tendencia alcista en los servicios profesionales y empresariales, la asistencia sanitaria, el ocio y la hostelería, y la asistencia social.
En abril, las ganancias promedio por hora de todos los empleados en las nóminas privadas no agrícolas aumentaron 16 centavos, o un 0,5%, hasta los 33,36 dólares.
Durante los últimos 12 meses, las ganancias promedio por hora han aumentado un 4,4%, en un momento en el que la inflación se sitúa en el 5%, según los últimos datos publicados correspondientes al mes de marzo.
Desde que alcanzara su pico del 9,1% en junio del 2022, la inflación ha ido bajando, como consecuencia de la serie de subidas de los tipos de interés que ha llevado a cabo la Reserva Federal para enfriar la economía y bajar los precios.
La última, la décima, tuvo lugar esta semana y fue de 0,25 puntos, por lo que las tasas de interés se sitúan actualmente en una horquilla de entre el 5 y el 5,25%.
EL presidente del regulador, Jerome Powell, explicó en una rueda de prensa posterior al anuncio que las futuras subidas de tasas dependerán de las cifras macroeconómicas que registre el país en las próximas semanas y que datos como el desempleo o la tasa de inflación serán fundamentales para decidir si se frenan las subidas.
Todo ello en un contexto de fuerte inestabilidad del sistema bancario, con la caída de tres bancos en las últimas semanas, como consecuencia de las subidas de tasas.
La renta variable, previsiblemente, ha reaccionado con subidas ante las palabras de la Reserva Federal, mientras que el dólar bajó en relación al euro, así como el precio del petróleo.
Sin embargo, el mercado mantiene la prudencia, dado que la ‘Fed’ no ha dicho que el precio del dinero sea "apropiado", lo que es la palabra clave. Medidos en relación al indicador de la inflación preferido por la ‘Fed’, el índice de precios de consumo privado, los tipos de interés de EEUU son positivos, es decir, superiores al crecimiento de los precios.
Eso es aplicable tanto al índice general como al subyacente, que no incluye los elementos más volátiles del indicador, que son la energía y los alimentos.
Entre líneas
Si los problemas del sector financiero se agudizan, la restricción del crédito causada por las alzas de tipos podría combinarse con un endurecimiento de los bancos para conceder préstamos, ante la creciente morosidad y la pérdida de valor de su cartera de bonos del Tesoro (si suben los tipos de interés, el valor de los bonos baja, y viceversa).
Las posibilidades de una ‘recesión de balance’ han crecido, aunque la Reserva Federal ha tratado de compensarlas por medio de la creación de una ventanilla de financiación especial para bancos con problemas.
Es una medida paradójica, dado que supone inyectar liquidez por un lado a los bancos mientras que, por otro, con las alzas de tipos, se reduce ésta.
En conclusión
Las subidas de tipos se han combinado con una reducción de la cartera – lo que normalmente se conoce como el balance – de la Reserva Federal, que se había inflado con la compra por el instituto emisor de bonos del Tesoro e hipotecarios en el mercado entre marzo de 2020 y febrero de 2021 para contrarrestar la contracción económica causada por el Covid-19.
Cuando la ‘Fed’ compra deuda, aumenta la liquidez del mercado, ya que tiene que pagar por ella a las instituciones financieras que la tienen en sus carteras.
A su vez, cuando vende deuda, quita liquidez, ya que son los bancos y fondos los que tienen que pagar al banco central para hacerse con los títulos.
El alcance del impacto de la venta de deuda en la liquidez del mercado ha sido, sin embargo, objeto de debate, entre los que creen que ha sido considerable y quienes lo ven como más bien poco relevante