Ante las crecientes tensiones generadas por la incursión de aviones de guerra de China cerca del territorio de Taiwán, la presidenta de la isla asiática, Tsai Ing-wen, declaró de manera rotunda que la nación que dirige no se rendirá.
El Político
Conforme a las versiones informativas difundidas por las agencias noticiosas internacionales, entre ellas AFP, AP, DPA y DW, la líder taiwanesa manifestó: "Nadie puede forzarnos a seguir el camino que China dispuso para nosotros".
Los taiwaneses viven bajo la amenaza constante de una invasión militar de China, nación que considera a este territorio como suyo y parte de una de sus provincias. Además, el régimen de Pekín amenaza con usar la fuerza bélica si es que las autoridades de la isla proclaman formalmente su independencia.
Al pronunciarse sobre la situación en ocasión de la celebración de la fiesta nacional, la cual conmemora la revolución del 10 de octubre de 1911, que acabó con la última dinastía imperial china, Tsai fue explícita. Comentó tajantemente: "Deseamos una distensión de relaciones con Pekín. Y no actuaremos apresuradamente. Pero no deberían hacerse ninguna ilusión de que el pueblo taiwanés se doblegará ante la presión".
Gobierno de Taiwán dispuesto a defenderse
La presidenta, quien considera su territorio como soberano de facto, aseguró que su país "está en la primera línea de defensa de la democracia" y del gobierno a su cargo.
En la isla asiática rige un estado democrático propio desde la victoria de los comunistas en el continente en 1949. En tanto, las tensiones entre la isla y China crecieron a su máximo nivel en nunca conocidas en décadas con la presidencia de Xi Jinping en el gigante asiático. Este rompió la comunicación oficial con Taipéi tras la elección de Tsai hace cinco años.
La dirigente taiwanesa puntualizó también que “la reunificación completa de nuestro país puede conseguirse y se conseguirá”.