El Tribunal Supremo de EE.UU. falló hoy a favor de un inmigrante surcoreano que, por un mal consejo de su abogado, se declaró culpable de un cargo relacionado con posesión y distribución de droga sin saber que eso le iba a acarrear inevitablemente una orden de deportación.
En su veredicto, con 6 votos a favor y 2 en contra, los jueces del máximo tribunal de EE.UU. se posicionaron del lado de Jae Lee, un residente permanente que llegó al país desde su natal Corea del Sur en 1982, cuando era un adolescente.
Lea también: Amparados por el TPS piden al Congreso de EEUU aprobar residencia
Lee se estableció en Tennessee y en 2009 las autoridades encontraron pastillas de éxtasis en su casa, por lo que fue acusado de un cargo de tenencia y distribución de droga.
El abogado a quien recurrió Lee, Larry Fitzgerald, le aconsejó negociar una declaración de culpabilidad para lograr una condena a prisión más leve, sin advertirle que en su caso, al no ser ciudadano estadounidense, la orden de deportación posterior es algo inevitable.
Tras declararse culpable para evitar un juicio y ser sentenciado a un año de cárcel, Lee supo que se había iniciado el proceso para su deportación.
Lea también: Fiscalía: cargos imputados a Martinelli son no políticos y extraditables
El presidente del Supremo y encargado de redactar el fallo sobre el caso, el juez John Roberts, destaca en la opinión mayoritaria que Lee fue víctima de la "incompetencia" de su abogado y que hay "evidencia sustancial y no controvertida" de que no se habría declarado culpable de saber que eso acarreaba su deportación.
Con este fallo del Supremo, Lee tendrá derecho a un nuevo proceso judicial, pero se enfrentará a una posible deportación si es juzgado y condenado otra vez por el cargo relacionado con las drogas.
Fuente: EFE