Mario A. Beroes Ríos/El Político
La crisis financiera de la constructora Evergrande, que ha puesto de rodillas a una buena parte del empresariado de ese enorme país asiático, pareciera que también arrastrará a una buena parte de la banca china. Un problema que nadie esperaba
Tres de los mayores bancos de China dijeron que los prestamistas del país se enfrentan a múltiples dificultades este año, entre los que se encuentran la pandemia, la política mundial y la agitación interna en el sector inmobiliario.
Primero la construcción, ahora la banca
El sector bancario chino se enfrenta a "un entorno de negocios más complicado y severo", dijo el segundo mayor prestamista del país por activos, China Construction Bank Corp.
Por su parte, el presidente del Bank of Communications Co Ltd (BoCom) aseguró que será difícil que el banco obtenga beneficios satisfactorios este año.
China ha estado luchando contra un resurgimiento de las infecciones por Covid en algunas de sus mayores ciudades, lo que ha provocado confinamiento parciales y totales que, según los analistas, serán un lastre para la economía.
El principal impacto en los bancos será "el aumento de la morosidad en los sectores de servicios", dijo Nicholas Zhu, analista de Moody’s.
"Estas industrias incluyen la venta mayorista y minorista, los viajes de ocio y otros servicios de consumo discrecional".
Las advertencias de los bancos sobre las difíciles perspectivas se conocieron junto con las cifras de beneficios netos de todo el año de los tres prestamistas, que superaron las estimaciones.
En el caso del BoC, las utilidades del año completo aumentaron un 12.3%, hasta los 216,600 millones de yuanes, por encima de la estimación de 199,100 millones de yuanes en un sondeo de Refinitiv entre 17 analistas.
Lo mismo ocurrió en el CCB, donde el beneficio neto para el año completo aumentó un 11.6%, a 302,500 millones de yuanes, frente a la estimación de 293,100 millones de yuanes de Refinitiv entre 21 analistas.