Las relaciones entre Estados Unidos y Venezuela podrían mejorar, se daría una reconciliación, a propósito de la guerra que se libra actualmente entre la Federación Rusa y Ucrania. Siempre y cuando Washington pueda disolver los vínculos comerciales entre Caracas y Moscú.
El Político
Apenas la Federación Rusa, inició la invasión a Ucrania, EEUU y la Unión Europea le aplicaron un paquete de sanciones. Sobre todo desde el punto de vista económico.
Acercamiento con Caracas
Entre ellas figuran sanciones hacia el petróleo y el gas rusos. De inmediato Washington envió una delegación de alto nivel a Caracas.
Esta visita relámpago generó múltiples reacciones, tanto fuera como dentro de EEUU. Los republicanos aprovecharon la coyuntura para aumentar las críticas hacia la administración de Joe Biden.
Se especula que la Casa Blanca evalúa el levantamiento de sanciones, de manera progresiva hacia Miraflores.
Esto con el fin de establecer —paulatinamente— el intercambio comercial con el régimen de Nicolás Maduro. Pero a cambio de recibir miles de barriles de petróleo que se han dejado de adquirir a la Federación Rusa.
Ahora Venezuela es la nación más apetecible para EEUU. Pues podría convertirse nuevamente en un surtidor de crudo.
#21Mar Miembros del exilio cubano, nicaragüense y colombiano también rechazaron el acercamiento entre la Administración de Joe Biden y el régimen de Nicolás Maduro. #TVVNoticias #TVV
Reporte: @Doricer Alvarado pic.twitter.com/IvKM1YUGmJ
— TVV Noticias (@TVVnoticias) March 21, 2022
Críticos
Sin embargo, los detractores de este acercamiento han dicho que Venezuela no puede se considerada una nación confiable, desde el punto de vista del suministro de hidrocarburos.
El Senador Marco Rubio habló con el presidente de Colombia, Iván Duque sobre #Venezuela 'es una amenaza" para la región. pic.twitter.com/QhD1DaXsKJ
— Maibort Petit (@maibortpetit) March 10, 2022
Uno de los mayores detractores es el senador republicano, por el estado de Florida, Marco Rubio. El congresista ha manifestado en varias oportunidades su preocupación por el acercamiento entre Biden y Maduro.
Si Biden hace un trato con #Maduro por el petróleo que no necesitamos, habrá condenado a #Venezuela a vivir bajo una dictadura narcosocialista durante una generación y le habrá dado un gran impulso al régimen en #Cuba. pic.twitter.com/xYKXvnbHIb
— Marco Rubio (@marcorubio) March 9, 2022
En ese sentido ha expresado que: "si Biden hace un trato con Maduro por el petróleo que no necesitamos, habrá condenado a Venezuela a vivir bajo una dictadura "narcosocialista" durante una generación y le habrá dado un gran impulso —adicionalmente— al régimen en Cuba.
Adicionalmente, la figura de Juan Guaidó, como presidente encargado de Venezuela, reconocido por más de 50 naciones, quedaría minimizada por la Casa Blanca. Una paradoja, después de haberlo apoyado desde Washington.
Economía venezolana
El país caribeño esta anclado a una economía de monoproducción. Su único recurso para exportación es el petróleo.
Aunque produce algunos minerales estratégicos como oro, carbón, bauxita, níquel, titanio, el zinc, cobre, coltán y diamante, entre otros. Pero esto representa apenas el 1.07% del Producto Interno Bruto – PIB.
Sin embargo, desde la llegada del proyecto bolivariano, la principal industria, Petróleos de Venezuela – PDVSA, ha sido destruida de manera progresiva.
A esto se suman una alta corrupción y un manejo turbio de los fondos púbicos. Por eso su economía está enferma de gravedad.
Su producción ha mermado a niveles dramáticos. De haber producido 3,2 millones de barriles por día, ha pasado a menos de 500.000.
La reactivación de las ventas de crudo venezolano a EEUU sería un oxígeno, una manera de reactivar el progreso para Venezuela. Una forma en que los llamados “petrodólares” retornen a la nación bolivariana.
Esto sería un aporte muy importante de "petrodólares" para el régimen de Maduro. Pero, en paralelo, resultaría en un duro golpe para la alianza opositora venezolana, encabezada por Juan Guaidó.
Apoyo condicionado
La Casa Blanca no negocia sin condiciones. Y en el caso de Venezuela no sería diferente. Se especula mucho sobre cuáles serían las reglas que impondría Washington a Caracas.
Se dice que una de las condiciones que exigirían a Maduro es el apoyo público de Venezuela a la política de sanciones y bloqueo comercial impuesto por EEUU al presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin.
Esto supondría un rompimiento de relaciones con el gobierno de Moscú. Cosa que es altamente improbable.
Será muy difícil que Maduro se distancie de Putin y su gobierno, que ha sido uno de sus mejores aliados en las peores crisis políticas y económicas del país caribeño.
Contexto
Las sanciones contra Venezuela iniciaron bajo la administración Obama. El móvil principal se centro en la violación sistemática de los Derechos Humanos por parte del régimen de Maduro.
Luego, las sanciones se agudizaron dramáticamente durante la administración Trump. Incluso, fue ofrecida una recompensa de $15 mil dólares por la cabeza del mandatario venezolano.
La orden de captura a Nicolás Maduro fue emitida por el Departamento de Justicia de EEUU, el 26 de marzo de 2020, bajo la acusación de “narcoterrorismo”. En este sentido, se dice que la economía venezolana se sostiene gracias al narcotráfico.
La reconciliación sigue en pie
En todo caso, la posibilidad de que la economía venezolana reciba un respiro importante sigue sobre la mesa de discusión. EEUU juega aquí al gato y al ratón. Y lo que está en juego es un suministro sustituto de petróleo para Washington, y el regreso de los petrodólares para Caracas.