«No debe cundir la alarma, pero es necesario actuar de inmediato de forma drástica. Lo que ha sucedido era previsible y que ha sucedido en otros países», afirmó anoche el conocido virólogo Roberto Burioni.
El Político
Según el profesor Burioni, la solución está en aislar a todas las personas que estuvieron en contacto con los infectados.
El coronavirus llegó a Italia, aumentando a lo largo del día los casos confirmados: Dos muertos por el coronavirus en Italia, donde 10 pueblos están aislados
Hay otros 28 contagios en las regiones de Lombardía y Véneto que han puesto en alerta al país y cuestionan algunas de las bases hasta ahora establecidas para la transmisiónveintiséis en la región de Lombardía y otros dos en el Véneto.
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Uno de estos últimos, un hombre de 78 años, ha fallecido en Padua. Además, esta mañana se ha confirmado la muerte de una mujer en Lombardía.
El Gobierno lanzó un llamamiento a la calma, subrayando que no debe cundir el pánico. Pero el líder de la Liga, Matteo Salvini, pidió al Ejecutivo «cerrar los confines» y que valore la suspensión de Schengen, el tratado de la Unión Europea que abolió los controles fronterizos.
Hasta primeras horas de la tarde los infectados solo eran seis en Lombardía. Poco después se confirmaron quince casos, en total, en Lombardía -cinco de ellos son médicos y enfermeras- y otras dos personas más en Padua (Véneto). Esta mañana ya eran veintisés. El gobernador de esta región, Luca Zaia, ha confirmado que se trata de dos ancianos italianos de Vò Euganeo, hospitalizados en Padua, uno de ellos se encontraba en estado crítico y, finalmente, falleció anoche.
Vaya al médico
La primera alarma se desencadenó en Lombardía, al ser ingresado un empleado de la multinacional Unilever de Casalpusterlengo (Lodi), Mattia Y. M., de 38 años, que se encuentra en graves condiciones en terapia intensiva en el hospital de Codogno, municipio de 15.600 habitantes en la provincia de Lodi (Lombardía).
Entre los contagiados está también su mujer, una profesora embarazada de ocho meses, y un amigo del infectado de Unilever con el que compartía actividades deportivas. Mattia Y. M., originario de Castiglione d’Adda, pueblo de 4.700 habitantes de la provincia de Lodi (Lombardía) se había presentado el 15 de febrero en urgencias del hospital de Codogno, quejándose de problemas respiratorios, pero al poco fue enviado a su casa.
Después tuvo un agravamiento repentino y fue hospitalizado de nuevo en Codogno el pasado miércoles, día 19, resultando positivo en el test del coronavirus. En este hospital se han visto infectadas tres personas. Al establecer la cadena de contagio, se llegó a saber que Mattia, el «paciente cero», se había encontrado con un colega que había retornado de China el pasado 21 de enero, el presunto «caso índice», un mánager de la empresa MAE con sede en Fiorenzuola d’ Arda, municipio de la provincia de Piacenza, en la región de Emilia-Romaña, quien por el momento ha dado negativo, aunque ahora está aislado y en cuarentena.
Aislar es la primera medida
De inmediato se han adoptado medidas de emergencia. En principio se aisló a unas 250 personas para ser sometidas a análisis, entre ellas 160 empleados de la multinacional Uniliver, compañeros de Mattia Y. M. Todas ellas permanecerán en cuarentena durante catorce días.
A primeras horas de la tarde, el consejero de Sanidad de Lombardía pidió que, por precaución, los habitantes de los tres pueblos relacionados con las personas infectadas (Castiglione d’Adda, Casalpusterlengo y Codogno, pueblo este último donde no paran los trenes) permanecieran en sus casas, «en cuarentena voluntaria».
Después la medida se amplió a un total de diez pueblos de la región de Lombardía, uno en Véneto y otro en Emilia-Romaña. En esos municipios se han cerrado hasta el martes escuelas, bares, restaurantes, oficinas, instalaciones deportivas y se ha suspendido el carnaval.
Tenga comida en su casa, nunca se sabe
Al establecer la cadena de contagio, se llegó a saber que Mattia, el «paciente cero», se había encontrado con un colega que había retornado de China el pasado 21 de enero, el presunto «caso índice», un mánager de la empresa MAE con sede en Fiorenzuola d’ Arda, municipio de la provincia de Piacenza, en la región de Emilia-Romaña, quien por el momento ha dado negativo, aunque ahora está aislado y en cuarentena.
De inmediato se han adoptado medidas de emergencia. En principio se aisló a unas 250 personas para ser sometidas a análisis, entre ellas 160 empleados de la multinacional Uniliver, compañeros de Mattia Y. M. Todas ellas permanecerán en cuarentena durante catorce días.
A primeras horas de la tarde, el consejero de Sanidad de Lombardía pidió que, por precaución, los habitantes de los tres pueblos relacionados con las personas infectadas (Castiglione d’Adda, Casalpusterlengo y Codogno, pueblo este último donde no paran los trenes) permanecieran en sus casas, «en cuarentena voluntaria».
Después la medida se amplió a un total de diez pueblos de la región de Lombardía, uno en Véneto y otro en Emilia-Romaña. En esos municipios se han cerrado hasta el martes escuelas, bares, restaurantes, oficinas, instalaciones deportivas y se ha suspendido el carnaval.
El Ministro de Salud, Roberto Speranza, y el jefe de la Agencia Nacional de Protección Civil, Angelo Borrelli, acudieron por la tarde a Lombardía para mantener una reunión de crisis con las autoridades locales. Ninguno ocultó la gravedad de los hechos y dieron por activado el plan de emergencia para contener la expansión del virus.