El senador Lindsey Graham encabezo la propuesta de introducir una legislación federal contra el aborto el martes, la primera de su tipo desde que la Corte Suprema anuló Roe v. Wade en junio.
El Político
La Ley de protección de los niños no nacidos capaces de sufrir dolores contra los abortos tardíos prohíbe el aborto después de las 15 semanas de embarazo y establece algunas excepciones en casos de violación, incesto y para proteger la vida de la persona embarazada. Un médico que viole la ley podría enfrentar hasta cinco años de prisión.
Se trata del mayor esfuerzo de los conservadores para acabar con ese derecho en todo el país, después de que los estados hayan ido aprobando leyes contra el aborto en los últimos meses, aprovechando que en junio el Tribunal Supremo revocó el fallo "Roe contra Wade" que desde 1973 protegía el derecho de la mujer a elegir.
Por qué es importante
"Creo que debería haber una ley a nivel federal que diga que, después de 15 semanas, no debe haber aborto excepto en casos de violación, senador incesto o para salvar la vida de la madre", dijo Graham en una rueda de prensa, a la que acudió acompañado de varios activistas contra el derecho al aborto.
Prohibir el aborto a las 15 semanas podría impactar negativamente en aquellas pacientes con fetos que tienen malformaciones y que suelen detectarse a las 20 semanas de gestación.
Graham, que no se presenta a la reelección en noviembre porque ya lo hizo hace dos años, ha mantenido posturas contrarias al aborto durante sus casi 20 años en el Senado, pero se había posicionado en contra de la revocación del fallo "Roe contra Wade" por su valor como precedente judicial.
Lo que implica
La propuesta de Graham no tiene ninguna posibilidad de prosperar en el Congreso, donde los demócratas tienen mayoría en las dos cámaras; pero sirve para poner sobre la mesa una medida que podría unir a todos los miembros del Partido Republicano, cuando quedan apenas dos meses para las elecciones legislativas.
Hace solo unas semanas, el líder de la mayoría en el Senado de EE.UU., Mitch McConnell, había dicho que no propondría un veto al aborto a nivel nacional senador.
Sin embargo, desde entonces, los demócratas han usado el aborto para movilizar a su base y ganar terreno de cara a las elecciones, donde las encuestas aventuran ahora un mejor resultado para los progresistas que antes del fallo del Tribunal Supremo, aunque aún podrían perder la Cámara Baja.
En conclusión
En un comunicado, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, arremetió contra Graham por su propuesta y le recordó que no está en consonancia con lo que piensa la mayoría de los estadounidenses, ya que un 61% cree que el aborto debería ser legal en todos o casi todos los casos, según un sondeo del Centro Pew.
La portavoz, además, reiteró que Biden y los demócratas del Congreso están comprometidos con defender el derecho al aborto a nivel federal, especialmente ante los "pasos radicales" que han dado los republicanos para arrebatar a las mujeres el derecho de decidir sobre su salud.
Fuente: swissinfo.ch