El senador francés Joël Guerriau enfrenta graves acusaciones después de ser formalmente acusado por un juez y puesto bajo control judicial por presuntamente drogar y abusar de una diputada.
El Político
Al senador se le imputan los cargos de suministrar una droga a una diputada con la intención de asaltarla sexualmente y de posesión de narcóticos. Guerriau fue detenido por la Policía Judicial y presentado ante un tribunal que decidió abrir un proceso en su contra.
La acusación formal señala que el senador administró a la diputada Sandrine Josso una sustancia sin su conocimiento, con el propósito de alterar su discernimiento y cometer una violación o agresión sexual.
Sumado a esto, los cargos por posesión y uso de sustancias estupefacientes también figuran en su contra, según su abogado.
Guerriau podría resultar encarcelado
Aunque el control judicial impuesto es considerado ligero, ya que solo prohíbe el contacto con la víctima y requiere someterse a tratamiento, esto permite que el senador permanezca en libertad. Sin embargo, los cargos en su contra podrían resultar en una condena máxima de cinco años de prisión y una multa de hasta 75.000 euros.
La decisión judicial se produjo después de un careo entre el senador y la diputada Josso en una comisaría de Policía de París, donde esta última denunció que, luego de visitar la vivienda del senador para cenar, se sintió mareada y experimentó un elevado ritmo cardíaco después de beber un vaso de agua ofrecido por Guerriau.
Preocupada por lo ocurrido, abandonó rápidamente la vivienda y solicitó ayuda médica en la Asamblea Nacional, donde posteriormente se determinó la presencia de éxtasis en su organismo. La Policía Judicial registró la vivienda del senador y encontró la droga, lo que llevó a su detención.
Tras 48 horas de detención provisional, Guerriau fue presentado ante el juez. A través de su abogado, el senador se declara inocente y asegura que nunca tuvo la intención de hacerle daño a Josso, quien es una amiga de larga data.
Para el senador todo fue un “error”
En respuesta a la situación el senador exponía estar convencido de que todo se debió a un error de manipulación de la sustancia.
El político de 66 años, independiente adscrito al partido de centroderecha Horizons desde 2011, representa al departamento de Loira Atlántico en el oeste de Francia y actualmente ocupa el cargo de vicepresidente de la Comisión de Asuntos Exteriores, Defensa y Fuerzas Armadas del Senado francés.
Por su parte la presunta víctima, Sandrine Josso, de 48 años, es parlamentaria del mismo departamento desde 2017, habiendo sido afiliada al partido macronista LREM y actualmente representando al partido centrista MoDem desde 2020.