Jamie Raskin, miembro del comité selecto de la Cámara de Representantes que investigó el ataque al Capitolio del 6 de enero, dijo que el próximo paso para salvaguardar la democracia es reformar los Colegios Electorales en Estados Unidos.
El Político
Esto con el objetivo de garantizar que el ganador presidencial refleje el resultado del voto popular en las elecciones.
“Los Colegios Electorales ahora, que nos ha dado cinco perdedores en el voto popular como presidente en nuestra historia, dos veces solo en este siglo, se ha convertido en un peligro, no solo para la democracia, sino para el pueblo estadounidense. Era un peligro el 6 de enero”, dijo Raskin.
Reforma de Colegios Electorales en EEUU
Para Raskin "hay tantos desvíos, curvas y rincones y grietas en los Colegios Electorales, que hay oportunidades para muchas travesuras estratégicas. Deberíamos elegir al presidente como elegimos a los gobernadores, senadores, alcaldes, diputados, todos los demás. El que obtenga más votos gana”.
“La verdad es que necesitamos estar renovando y mejorando continuamente nuestras instituciones” dijo a Politico.
Luego señaló que apoya el Pacto Interestatal del Voto Popular Nacional, que representa un compromiso hecho por ciertos estados y el Distrito de Columbia para otorgar sus votos electorales. al candidato que gane el voto popular a nivel nacional.
House January 6th Committee member Rep. Jamie Raskin says that passing Electoral Count Act reform “doesn’t solve the fundamental problem.”
“I'm for that, and that's the very least we can do and we must do. It's necessary, but it's not remotely sufficient.” pic.twitter.com/1eZc2opqRm
— Face The Nation (@FaceTheNation) December 25, 2022
Amplió proyecto de ley
“Los redactores [de la Constitución] fueron geniales y eran patriotas, pero no tuvieron el beneficio de la experiencia que hemos vivido, y sabemos que el Colegio Electoral ya no encaja”, observó Raskin.
En el amplio proyecto de ley de gastos que el Congreso aprobó la semana pasada se incluyó una medida destinada a dificultar la anulación de una elección presidencial certificada.
Raskin describió la medida, que reformaría la Ley de Conteo Electoral de 1887, como “necesaria” y “lo mínimo que podemos y debemos hacer”.