Si se pensaba que la decisión alemana de paralizar las negociaciones "para el gaseoducto Nord Stream-2″, si los rusos invaden Ucrania, iba a ser una presión disuasiva sobre Vladimir Putin, quedó claro ayer que tal cosa no cambiaría la posición del Kremlin sobre el acosado país.
El Político
El primer encuentro presencial de los ministros de Exteriores de Rusia y Alemania, Serguéi Lavrov y Annalena Baerbock, discurrió ayer en Moscú también de forma tensa. Al igual que los sostenidos previamente por representantes rusos y sus colegas de EEUU y la OTAN.
Baerbock le dijo a su interlocutor ruso que «es difícil para los países europeos no percibir como una amenaza la gran concentración de fuerzas rusas» junto a la frontera con Ucrania.
A lo que Lavrov respondió asegurando que su país "no amenaza a nadie" y despliega sus tropas dentro de su propio territorio como estima conveniente.
"Hemos explicado que no podemos aceptar ninguna demanda con respecto a las acciones de nuestras Fuerzas Armadas en nuestro propio territorio", declaró el jefe de la Diplomacia rusa durante la rueda de prensa conjunta.
“Rusos se mueven en su territorio”
Al argumento de Baerbock de que en las últimas semanas, "más de cien mil soldados y equipos militares rusos se han desplegado cerca de Ucrania sin razón aparente", Lavrov con gran desparpajo respondió que "muchos políticos occidentales llaman escalada a la presencia de nuestras tropas en nuestro territorio y a los ejercicios necesarios para el entrenamiento de combate.
"Cualquier país realiza este mismo tipo de actividades para preparar su ejército. Nosotros no amenazamos a nadie, pero sí escuchamos amenazas contra nosotros", agregó Lavrov.
Para puntualizar más adelante que espera que todo ello "sea solamente el reflejo de ciertas emociones de ciertas fuerzas en Occidente".
Por Ucrania: Amenazan al gasducto ruso
Se refirió, a renglón seguido, a las advertencias de la propia Baerbock, lanzadas en la víspera durante su visita a Kiev, de que cualquier ataque de Rusia a Ucrania "tendrá consecuencias para el gaseoducto Nord Stream-2″.
"En cuanto a las consecuencias que, como usted ha dicho, podríamos tener que afrontar, no puedo adivinar qué medidas tomará el Gobierno alemán en tal o cual situación. Pero nosotros no hemos dado ningún pretexto para que surja una nueva situación de conflicto", subrayó el canciller ruso.
"Politizar un proyecto comercial como es el Nord Stream-2, es contraproducente", advirtió.
No a la presencia de la OTAN en Ucrania
Lavrov volvió a plantear lo que es un tema recurrente para Rusia.
El Kremlin exige en particular que:
- Ucrania nunca entre a formar parte de la Alianza,
- Se reduzca la presencia de este bloque militar occidental en el este de Europa
- Y se asegure que no se desplegarán bases militares en antiguas repúblicas soviéticas. (Sin contar Estonia, Letonia y Lituania, que ya son miembros de la OTAN).
Los rusos seguirán inamovibles en la frontera con Ucrania. Lo consideran su territorio.
Fuente: ABC