El Servicio Federal de Seguridad (FSB) de Rusia anunció este miércoles el arresto de ocho personas supuestamente involucradas en la explosión del pasado sábado en el puente de Kerch, que une la región rusa de Krasnodar con la península de Crimea.
El Político
No debe haberles agradado mucho a la inteligencia rusa, ni menos a Vladimir Putin, el tener que reconocer que entre los ocho detenidos, se encontraban nada menos que cinco rusos y tres de Ucrania y Armenia. En la información no se aclaró cuántos eran de Ucrania y cuántos de Armenia.
Agregaron, eso sí, haber identificado a 12 personas también sospechosas de estar implicadas en lo que califica de «acción terrorista«, definición que ya empleó el domingo el presidente Vladímir Putin y el jefe del Comité de Instrucción (SK), Alexánder Bastrikin.
La acusación de Rusia
En el comunicado del FSB se asegura que el responsable directo del ataque contra el puente, el que dio la orden de ejecutarlo, fue Kirill Budánov, que ejerce el mando de la Dirección Principal de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania (GUR).
Él y el resto de los miembros que componen la cúpula de la GUR han sido acusados por la Justicia rusa de organizar el «sabotaje» en el puente.
«Como se ha establecido en la investigación, el artefacto explosivo fue camuflado en rollos de película de polietileno para material de construcción en 22 envolturas con un peso total de 22,7 toneladas. A principios de agosto fue enviado desde el puerto de Odessa a la ciudad búlgara de Ruse«, sostiene la nota, que señala a las empresas »Translogistik UA« (Kiev) y »Baltex Capital S.A.« (Ruse) como socios de la transacción.
Por qué es importante
Según la FSB ciudadanos de Rusia, Ucrania, Georgia y Armenia participaron en la organización del transporte de carga desde Bulgaria hasta el puerto de Poti, en Georgia, y luego a Armenia.
El puente, inaugurado personalmente por el presidente ruso, Vladimir Putin, en 2018, es ahora vital para la campaña militar rusa. A través de él se han canalizado suministros para las tropas que luchan en el frente sur de Ucrania.
El gobierno de Moscú acusó a Kyiv de orquestar el ataque, pero un funcionario ucraniano calificó la investigación rusa de "absurda".
Los hechos según la FSB de Rusia
De acuerdo con las informaciones de los servicios secretos rusos, el 4 de octubre, a bordo de un camión DAF matriculado en Georgia. La carga cruzó la frontera ruso-georgiana en el puesto de control de Verjni Lars.
el 7 de octubre pusieeron la carga de «camuflaje» y los explosivos en el camión propiedad del ciudadano ruso, Majir Yusúbov. Cuyo tío se puso al volante y perdió la vida en la explosión.
Ya de camino hacia Crimea, cuando atravesaba el puente de Kerch, a las 06.03 de la mañana del día 8 de octubre, el vehículo saltó por los aires, lo que, según sostiene el FSB, dañó la infraestructura.
Los dos carriles del sentido de la calzada en dirección hacia Crimea quedaron prácticamente hundidos en el mar en dos puntos de un tramo de decenas de metros.
Cuatro es el número de muertos declarados hasta ahora a causa del ataque, cuya explosión prendió además varias cisternas de un tren de mercancías.
La venganza de Putin
Putin ordenó el lunes como represalia ataques masivos contra ciudades ucranianas y un gran número de centrales eléctricas, que continuaron el martes.
Advirtió a Kiev que, si vuelve a atacar «infraestructuras civiles cruciales» como el puente de Crimea en territorio ruso, ya que el Kremlin considera la anexionada península parte de Rusia, habrá una respuesta todavía más «dura».
Otros arrestos
El FSB ha reportado este miércoles también la desarticulación de dos supuestos intentos de «atentados terroristas» en Briansk y Moscú, en ambos casos atribuidos a personas llegadas a Rusia desde Ucrania al servicio de la Inteligencia de Kiev.
Al parecer, el objetivo del ataque en Briansk era una terminal logística. Un sospechoso de nacionalidad ucraniana ha sido detenido con un artefacto explosivo de fabricación casera. También fue arrestado otro ucraniano que presuntamente planeaba ataques con misiles en la región de Moscú.
En conclusión
La explosión en el puente de Crimea fue un poderoso golpe simbólico para el presidente ruso Vladimir Putin, quien la infraestructura en 2018, 4 años después de la anexión rusa de la península ucraniana.
La noticia de las aprehensiones se produjo al tiempo que se registraron nuevas explosiones en las ciudades ucranianas de Jersón, Zaporiyia y Nikopol.
El secretario de Prensa del Kremlin, Dmitry Peskov, al ser consultado sobre si los objetivos de la "operación militar especial" –como Moscú llama a su invasión- seguían siendo los mismos, respondió que son "exactamente los mismos".
Tras los nuevos ataques del martes, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski instó a los países a golpear a Moscú con más sanciones en respuesta a "una nueva ola de terror".
El G-7 prometió seguir prestando apoyo "financiero, humanitario, militar, diplomático y jurídico" a su país "durante el tiempo que sea necesario". Una garatía que también ofreció la OTAN.
Fuente: Agencias