Ante la posibilidad de un ataque a la central nuclear de Zaporiyia, con consecuencias devastadoras para buena parte de Europa, en Ucrania dan un paso adelante y comenzaron a preparar a la población para que sepa qué hacer en caso de una explosión de la planta.
El Político
Las autoridades ucranianas están realizando simulacros con la población de manera que puedan entender cuál será el protocolo de acción desde que reciben la alarma nuclear a través de mensajes en el teléfono celular, en la televisión y en la radio. A partir de ese momento saben que deben abandonar sus casas para resguardarse en refugios o búnkeres.
En contexto
Los pobladores de Zaporiyia piensan que el ataque está cerca y una de las razones que señalan es la destrucción de la presa Nova Kajovka. Si Rusia atacó la presa, como señalan informes de inteligencia, también puede atreverse a atacar la central, aseguran.
De acuerdo a lo dicho por Kirilo Budanov, jefe de la inteligencia militar de Ucrania, el Kremlin tendría un plan redactado para atentar contra la planta. Según el funcionario, las fuerzas rusas habrían colocado minas en el estanque que permiten enfriarla.
Este planteamiento no fue validado por la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA), cuyo director general, Rafael Grossi, realizó una inspección y aseguró que no se identificaron nuevas minas.
Desde el gobierno de Estados Unidos han asegurado que no ven indicios de un ataque inminente a la planta.
Panorama general
La planta eléctrica de Zaporiyia en Ucrania se convirtió en la primera central nuclear de la historia que siguió funcionando en medio de una guerra.
La central está ocupada por las fuerzas rusas desde marzo de 2022.
Cuando se destruyó la represa de Kajovka en el río Dniéper, a mediados de junio, cuya agua se utiliza para enfriar los seis reactores, se generó un alarma por el estado de la central. Sin embargo, Rafael Grossi, jefe de Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), estimó en ese momento, que la situación de la central nuclear ucraniana de Zaporiyia era "grave" pero que estaba en vías de estabilización,
La central ha sido atacada varias veces por bombardeos de los que Rusia y Ucrania se acusan mutuamente. En varias oportuniaddes quedó cortada la red eléctrica, lo que generó preocupación sobre su seguridad. El OIEA tiene un equipo de expertos instalado de manera permanente en la central.
¿Qué sigue?
La organización de las Naciones Unidas y la comunidad en general han rechazado la presencia rusa en la central nuclear y han solicitado que Zaporiyia esté protegida como infraestructura puramente civil y garantizar la seguridad de la zona. Esto no se ha logrado.
El temor de un episodio como el de Chernóbil permanece latente entre los líderes mundiales. Tanto en Rusia como en Ucrania evalúan los efectos de una explosión de la planta. El Ministerio de Defensa de Rusia y el Instituto Hidrometeorológico Ucraniano han realizado mapas para ver los países que podrían verse afectados, según reportes publicados en los medios.
En este contexto, Ucrania comienza sus simulacros de respuesta a ataques nucleares.