El Mobile World Congress presume de muchas cifras: más de 100.000 visitantes, un impacto en Barcelona superior a los 450 millones de euros… De lo que no ha podido presumir hasta la edición de este año, inaugurada esta mañana, es de haber puesto al Rey Don Felipe a practicar «luge»,práctica olímpica consistente en deslizarse con un patín por un tobogán de hielo.
Redacción El Político
No es que el Mobile se haya convertido en sede de los Juegos De Invierno, sino que ha sido posible gracias a la realidad virtual. Y no sólo eso: el Rey se ha estrenado en el «luge» acompañado del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en una demostración ofrecida por Korea Telecom dentro el recorrido que Don Felipe y Puigdemont han hecho esta mañana en el tradicional paseo inaugural de la primera sesión del MWC.
Como en las demostraciones de realidad virtual, ambos se ha colocado una gafas de 3D sentados en dos butacas paralelas cuyo movimiento se coordinada con el de las imágenes que ambos veían de manera simultánea. La cara de asombro y sus expresiones durante y después de la experiencia dan fe de que el descenso ha debido ser de impacto.
La práctica virtual del «luge» ha sido la anécdota más destacada del habitual recorrido inaugural que Don Felipe y Puigdemont han realizado esta mañana acompañados del resto de autoridades, entre estas la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, el vicepresidente catalán, Oriol Junqueras, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y la presidenta del Parlament, Carme Forcadell.
Como es habitual, toda la comitiva se ha mostrado algo abrumada ante el despliegue tecnológico de stands de los principales operadores y marcas telefónicas. Ada Colau, afrontando la recta final de su embarazo, reconocía distendida que este tipo de aglomeraciones no son lo mejor para un mujer en su estado.
La alcaldesa de Barcelona, en charla informal, valoraba muy positivamente que la organizadora del congreso, la GSMA, haya entendido el «giro social»que el Ayuntamiento ha querido imprimir al Mobile desde que ella es primera edil. «A través de la Fundación la relación con ellos es muy fluida, es un evento que está ya consolidado en Barcelona», ha explicado en alusión a un contrato que vincula, por el momento, al MWC con Barcelona al menos hasta 2023.
Por su parte, Puigdemont se ha mostrado hoy convencido de que esta edición del MWC será «la mejor de todas», y ha tildado de «impecable» la organización del evento. El presidente catalán ha aprovechado también para reivindicar a Cataluña como una «nación digital», y para subrayar que la agenda digital es una «prioridad» del ejecutivo catalán.