Han pasado 11 días del atentado perpetrado a Luciano Marín Arango, más conocido por su alias Iván Márquez, y lo único totalmente cierto es la imposición de la "ley del silencio"por parte del régimen de Nicolás Maduro en torno al tema.
El Político
El disidente guerrillero colombiano, exsenador colombiano por el partido de la FARC, comandante de la disidencia de las FARC-EP Segunda Marquetalia, fue atacado en su campamento en las cercanías de la población de Barrancas del Orinoco, estado Bolívar, Venezuela, cerca de la frontera con Colombia.
Hasta ahora el único comentario público del régimen chavista es la escueta comunicación del ministro de propaganda, Freddy Ñáñez, quien el jueves 7 negó que su despacho manejara información sobre el paradero de alias Iván Márquez.
“En algún momento se va a esclarecer”, afirmó sobre las “especulaciones interesadas en politizar y en estigmatizar a Venezuela”.
Pero la dictadura venezolana acumula los rumores de la posible participación de venezolanos, incluyendo 4 oficiales del Ejército, que priorizaron beneficios económicos a órdenes superiores.
Uno de esos rumores se escucha en la sede del Ministerio de la Defensa, donde aseguran que el ataque ocurrido el 29 de junio, no pudo concretarse sin la ayuda de efectivos del Ejército venezolano.
Alias Iván Márquez podría estar recluido en la UCI del Hospital Militar "Carlos Arvelo", al suroeste de Caracas.
El PSUV evade el tema
En el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), evitan fijar posición.
Algunos miembros, bajando la voz, señalan que habrá que esperar a que Diosdado Cabello, el vocero habitual de la organización política, brinde alguna declaración, pues solo él está autorizado a referirse al tema.
El también diputado no mencionó el asunto en su programa de televisión del miércoles 6, en el que usualmente comenta todo tipo de informaciones durante casi cuatro horas.
Datos recopilados por la revista Semana, indican que Nicolás Maduro, por su parte, ha optado por el silencio total.
Ni se refiere al comentario hecho por el presidente Iván Duque el 2 de julio en el que el Gobierno colombiano intentaba verificar la supuesta muerte del líder de la Segunda Marquetalia.
La guerra en Venezuela
La discreción oficial, sin embargo, no ha podido impedir las confirmaciones sobre la presencia de las disidencias de las Farc en Venezuela y complicidades estructurales con miembros de las Fuerzas Armadas.
Hasta ahora son cuatro las muertes de jefes de las disidencias de las Farc en el último año: Miguel Botache Santanilla, alias Gentil Duarte; Seuxis Pausías Hernández, alias Jesús Santrich; Henry Castellanos, alias Romaña; y Hernán Darío Velásquez, alias el Paisa.
Este cuarteto de fallecimientos han ocurrido en los estados Apure, y Zulia, estados fronterizos con Colombia, en medio de la guerra.
Fuentes del régimen de Maduro no dudan en considerar que el ataque a Iván Márquez ocurrió por acción de cuerpos irregulares.
Quizá el frente 1 de las disidencias de las Farc, pues el Ejército venezolano tiene una activa prohibición de actuar contra él o sus compinches, quienes, además, han ampliado sus zonas de influencia territorial y de impunidad en Venezuela.
Informe CSIS
Un informe del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS) de Washington registró, desde 2020, que las disidencias de las Farc obtienen más de la mitad de su financiación por medio de la minería ilegal en Venezuela.
Son los espacios del Arco Minero del Orinoco, ubicado en el estado Bolívar, donde habría ocurrido el ataque contra Márquez, específicamente en la zona de Caicara del Orinoco.
La Segunda Marquetalia controla al menos cuatro municipios de Bolívar y todo el estado Amazonas.
El Arco Minero, que equivale al 12% del territorio nacional y donde se estima yacen más de 7.000 toneladas de oro, cobre y diamante.
Esta zona geográfica es tan amplia y rica, que se ha convertido en un botín de donde también se financia la guerrilla del ELN, (logrando allí el 60% de sus recursos, según CSIS) y otros grupos interesados asociados al chavismo.