En el mes de agosto el gobierno federal sacó -de repente- a todos los niños migrantes que se encontraban en el centro de detención Homestead, no se sabía con exactitud a dónde se habían llevados a más de 1.000 infantes.
El Político
Al ser consultados las autoridades federales aseveraron que los niños fueron entregados a patrocinadores o transferidos a instalaciones autorizadas por el estado, estás últimas son parte de un sistema de refugios financiados con fondos federales en todo el país, informó tampabay.com.
Una vocera del Departamento de Niños y Familias, DaMonica Smith, comentó que 48 infantes fueron trasladados a dos instalaciones con licencia de Florida, una ubicada en Miami Gardens y la otra se encuentra en Lake Worth, esta última atiende exclusivamente a niñas y adolescentes migrantes.
Según los registros del Servicio de Noticias de Florida, el estado realizó varias revisiones de ambas instalaciones este año.
Esos registros son una prueba del papel relativamente limitado que desempeña el estado para garantizar el bienestar de los niños que fueron separados de sus familias después de cruzar la frontera sur del país y ser detenidos, destaca tampabay.com.
Smith aseveró, que "el Departamento de Niños y Familias, solo es responsable de las licencias y la supervisión del cumplimiento de los estándares de licencias".
Las instalaciones de Miami Gardens y de Lake Worth reciben millones de dólares gracias a unos contratos que tienen con la Oficina de Reasentamiento de Refugiados del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos. Debido a la afluencia de menores migrantes la administración Trump decidió dar una partida para mitigar esta situación, y parte de ella es la que otorgan a estas instalaciones.
Al ser consultados sobre las operaciones de estos refugios ubicados en Florida, los agentes federales no quisieron declarar sobre este tema, aseverando que estaban protegiendo la "privacidad y seguridad de los niños extranjeros no acompañados".
Sin embargo, destacaron que -usualmente- los refugios de la red federal tardan aproximadamente 50 días en liberar a los niños para que estén con sus familias y patrocinadores.
Instalación de Lake Worth
Una especialista en licencias de Florida, Michelle Windfelder, fue a revisar la instalación de Lake Worth, ubicado en el condado de Palm Beach para realizar un informe, el mismo fue aprobado por el estado para que el Comité de Refugiados e Inmigrantes de EEUU lo ayudara.
En julio, Windfelder detalló en su informe que el refugio de Lake Worth albergaba a 38 niñas, 11 de las cuales provenían de una instalación no identificada y el resto fueron traídas de la frontera.
Según Wildfelder, "Todo se veía genial", agregó, "El personal informa que no tuvo problemas de comportamiento ni situaciones conflictivas con las niñas. Las jóvenes presentes están agradecidas por su ayuda ".
Pero también informó que las niñas tenían algunos problemas médicos que el personal estaba atendiendo como piojos en algunas de las infantes y quemaduras en los pies debido a las largas caminatas que realizan desde sus países de origen.
El informe de Windfelder también precisó que dos niñas habían tenido problemas para encontrar a sus familiares o patrocinadores apropiados, el resto de las adolescentes localizaron a alguna persona que podía cuidarlos.
Para el 30 de agosto, el refugio había acogido a 21 adolescentes del centro de migrantes de Homestead, dijo Smith. Cabe destacar que este año, el centro de Homestead se convirtió en un punto álgido en el debate nacional sobre la política de inmigración y el manejo de los niños migrantes por parte de Donald Trump.