La serie de derrotas, la muerte de varios generales; en pocas palabras el descalabro del ejército ruso al tratar de invadir a Ucrania y derrotar sus fuerzas armadas en pocos días, ha obligado a Putin a replantear su estrategia bélica.
Mario A. Beroes Ríos/El Político
El plan de Vladimir Putin cambió. Kiev ya no es la meta de la nueva embestida de Rusia contra Ucrania sino la cabeza de su presidente, Volodímir Zelenski.
Zelenski es el objetivo de las fuerzas de Moscú, bajo las órdenes del general Alexander Dvornikov, el “carnicero de Siria” que ahora comanda los batallones del Kremlin.
Para “la caza de Zelenski”, Dvornikov contará con tropas por tierra, mar y aire, que juntas, forman una Brigada de comandos especiales rusos dividida en dos secciones de unos 80 hombres altamente entrenados para acabar con la vida del mandatario como parte del “plan adicional” incluido en las ofensivas militares.
Inteligencia de EEUU advierte
La inteligencia estadounidense sospecha que esta fuerza especial ya opera detrás de las líneas ucranianas en la ciudad portuaria de Mariupol, destruida por los bombardeos rusos desde febrero.
La orden de Putin al general Dvornikov ha sido directa, pretende la eliminación física de Zelensky y su equipo para descabezar la resistencia ucraniana.
El riesgo sobre la integridad física del presidente creció peligrosamente, igual que para sus asesores cercanos y sus jefes militares, quienes reforzaron su seguridad siguiendo lo indicado por la información de inteligencia estadounidense.
Con estrategia
Zelenski toma previsiones. Su equipo también está alerta y en constante movimiento, desplazándose en la zona oriental ucraniana, desde el centro al norte, evitando el sur por su cercanía con Crimea, donde los comandos rusos establecieron su base operacional.
Ya cambió su teléfono satelital tras descubrir que era monitoreado por tecnología de la inteligencia rusa mientras que su seguridad esquiva el circuito secreto de cámaras que los militares rusos instalaron en las ciudades que ocuparon y de las que se han replegado.
Las medidas intentan sortear que Rusia incorporó aparatos para la detección de voz en distintos lugares lugares para identificar a Zelensky pero, ahora, el mayor peligro son los Drones rusos con capacidad de activarse de forma remota y configurar un temporizador que puede obtener información en tiempo real sobre movimientos de la caravana presidencial
Con la información obtenida de cualquiera de esas tecnologías, Moscú puede ejecutar ataques aéreos o de misiles ultrasónicos que impactan su blanco según la distancia entre los dos y cuatro minutos de ser disparados lo cual hace viable la caza de Zelensky.
Ensañamiento contra Kiev
Mientras Rusia intenta ubicar a Zelensky para su caza, aumenta sus ataques contra Kiev al destruir 16 instalaciones del ejército ucraniano con misiles de alta precisión las naves de una fábrica de material militar.
En otras zonas como Mykolaiv (al este de Ucrania) o Poltava (al noreste) también han realizado ataques contra instalaciones enemigas.
"El número y el nivel de los ataques con misiles en Kiev aumentará en respuesta a todos los ataques de tipo terrorista y sabotaje que ha llevado a cabo el régimen nacionalista de Kiev en territorio ruso", había asegurado el portavoz del ministerio de defensa ruso, Igor Konashenkov.
Represalias contra el Reino Unido
Otro que cayó en los radares rusos es el primer ministro británico, Boris Johnson, quien junto a 12 altos cargos de su Gobierno ahora no podrá pisar Moscú por "las acciones hostiles sin precedentes" contra Putin.
Según Putin, el Reino Unido "agrava a propósito la situación en torno a Ucrania al atiborrar de armas letales al régimen de Kiev y coordinar esfuerzos similares de parte de la OTAN".
Incluso, cuestionan una supuesta "política rusófoba”.
Las oficinas en Moscú de las organizaciones Amnistía Internacional, Human Rights Watch y la Fundación Friedrich Naumann, además de otras 20 organizaciones no gubernamentales de países occidentales también cayeron en desgracia y fueron clausuradas por Putin.
Sus acciones no pasan desapercibidas.
La presentadora del canal Rossiya 1 Olga Skabeyeva asegura que la Tercera Guerra Mundial ya ha comenzado, luego de que las fuerzas ucranianas consiguieran hundir el Moskva, el buque insignia del Kremlin.
Mientras, la ministra finlandesa de asuntos exteriores, Tytti Tuppurainen, admite la alta probabilidad de que Finlandia presente su candidatura para ingresar a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), a raíz de la invasión rusa de Ucrania.
“Es muy probable, pero la decisión todavía no se ha tomado”, dijo la funcionaria a la cadena británica Sky News. Además, destacó que “una gran mayoría” de los finlandeses está “a favor de una adhesión a la OTAN”.
Todo esto, para Hanna Notte, investigadora del Centro de Desarme y No Proliferación de Viena, es parte de las cinco tácticas que Rusia usó en Siria donde configuró una guerra secuencial que incluyó cercar ciudades, realizar asedios y bombardeos.