El publicista Joao Santana, responsable de la campaña que llevó a la reelección de la presidenta brasileña Dilma Rousseff en 2014, confesó que mintió a la justicia sobre el dinero "negro" recibido por ese trabajo, con la intención de proteger a su representada ante el proceso de destitución que enfrentó desde mayo.
Rafael Rodríguez / Político
"Sabía que podía perjudicarla profundamente" y "después de haber ayudado a su reelección, no sería yo quien iría a destruirla", dijo Santana en declaraciones ofrecidas a la Policía.
Santana, que está preso desde marzo por su presunta implicación en las corruptelas en la estatal Petrobras, reconoció que en su primera declaración ante los jueces mintió al negar que hubiera recibido parte de los pagos por la campaña de 2014 en unas cuentas que tenía en el exterior.
El publicista confesó en esta oportunidad que los responsables financieros de la campaña de Rousseff depositaron al menos 4,5 millones de dólares en cuentas que mantenía ocultas en un banco suizo, lo cual puede constituir delitos fiscales e incluso de lavado de dinero.
Aseguró que estaba consciente "del problema" que su confesión significaría para la actual presidenta suspendida "y para el propio país".
Santana, de 63 años, es uno de los publicistas más reconocidos del país y dirigió las campañas electorales de Luiz Inácio Lula da Silva en 2006 y de Rousseff en 2010 y 2014.
Con información de Listin Diario