La legislatura del estado de Nueva York ha propuesto un proyecto de ley que ha generado controversia y debate. Este proyecto busca permitir a los menores someterse a procedimientos de cambio de sexo sin el consentimiento de los padres.
El Político
El proyecto de ley A06761, presentado por la asambleísta estatal demócrata Karines Reyes en enero, plantea que los jóvenes sin hogar puedan “dar su consentimiento efectivo a ciertos servicios médicos, dentales, de salud y hospitalarios”.
Sin embargo, la redacción del proyecto es deliberadamente “vaga”, lo que ha generado preocupación entre los defensores de los padres.
En concreto, la ley permitiría a los menores autorizar sus propios tratamientos de cambio de sexo sin necesidad de aprobación paterna. Además, los médicos estarían prohibidos de alertar a los padres sobre el tratamiento médico o de salud mental de sus hijos, a menos que el niño lo solicite expresamente.
Sarah Parshall Perry, miembro legal principal del Centro Edwin Meese III de Estudios Legales y Judiciales de la Fundación Heritage, considera que esta legislación intenta sortear las leyes que requieren la aprobación de los padres para los procedimientos de cambio de sexo en menores.
Por otro lado, Michael Kane, un ex maestro de educación especial convertido en defensor, advierte que los maestros y consejeros escolares podrían convertirse en herramientas del estado si el proyecto de ley se convierte en ley. Según Kane, el personal escolar en Nueva York ya se ve obligado a “afirmar” la disforia de género de un niño o arriesgarse a consecuencias disciplinarias. Además, dependiendo de las políticas de cada escuela, los administradores podrían asumir la responsabilidad del bienestar de los niños en lugar de los padres, ya que los instructores estarían temerosos de hablar por miedo a represalias o perder sus empleos.
Nueva York se alarma por las consecuencias negativas de estos procedimientos
El nuevo proyecto de Ley, resulta tan polémico debido a las innumerables pruebas científicas que demuestran que dichos procedimientos generan consecuencias negativas en los pacientes.
Entre los efectos negativos más importantes en cuanto a los procedimientos de cambio de sexo transgénero, se tienen el daño hepático, coágulos de sangre, daño óseo y problemas con la fertilidad.
Las cirugías de cambio de sexo conllevan consecuencias frecuentes y requieren numerosos procedimientos de seguimiento. Los cuales requieren, en el caso de los niños, ayuda de padres o responsables.
La asambleísta Karines Reyes afirmó que el proyecto de ley busca ayudar a una “fracción muy pequeña de los jóvenes que actualmente están cayendo en el olvido” a acceder a necesidades médicas, como vacunarse contra la gripe. Sin embargo, críticos argumentan que la redacción del proyecto es ambigua y podría tener implicaciones más amplias.
Expertos han advertido que, si se aprueba el proyecto de ley, los padres quedarían en la oscuridad en caso de “complicaciones de emergencia”.
La situación planteada por esta legislación ha generado preocupación y podría desencadenar una demanda masiva en el estado de Nueva York. Cabe mencionar que en 2023, la gobernadora demócrata Kathy Hochul firmó una ley que convierte a Nueva York en un estado santuario para los cambios de sexo infantil.