Javier Fernández se ha mostrado partidario de que el PSOE se abstenga en el pleno del debate de investidura para facilitar un Gobierno en España. En el vestíbulo del hotel La Reconquista de Oviedo, centro neurálgico de los Premios Princesa de Asturias, el presidente de la gestora socialista ha explicado este viernes que será el comité federal del domingo el que decida la posición ante Mariano Rajoy, "entre la abstención o las terceras elecciones". Personalmente, el también presidente del Principado de Asturias ha apostado por que el partido se abstenga en la segunda votación. "La primera debe ser un voto de rechazo a las políticas del PP", ha apuntado.
Es la primera vez que el máximo responsable del PSOE plantea públicamente esta fórmula, que pretende limar las asperezas con el sector atrincherado en el no al PP. En las últimas horas ha insistido en pedir "coherencia" al PSC, que defiende el voto en contra, si el comité federal aprueba la abstención a una investidura de Rajoy.
El presidente de la gestora, que ha acudido a la recepción de los Reyes a los patronos de la Fundación Princesa de Asturias, ha asegurado que en este proceso el partido "ha cometido muchos errores", pero que los que pueda cometer ahora "serán nuevos": "Los que hemos cometido no los vamos a repetir". Según ha reconocido a preguntas de los periodistas, ha hablado estos días con el anterior secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, pero no en ningún caso le ha preguntado si va a dejar el escaño.
Fernández pide “coherencia” al PSC
Fernández ha insistido en pedir "coherencia" al PSC si el comité federal del PSOE de este domingo aprueba la abstención a una investidura de Mariano Rajoy. El primer secretario de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, ya ha dejado claro que los siete diputados de su partido votarían en contra del candidato del PP. "No quiero conflictos. Espero que reconsideren su votación. Mi deseo es que discurra por los cauces de la normalidad", ha manifestado este viernes el presidente de la gestora en RNE. Fernández ha apuntado que cree que la votación sobre la posición política que adopten los socialistas será por llamamiento.
"El PSC va a participar en esa votación, con pleno derecho y libertad, pero no sería razonable que vaya a votar y luego la vaya a cuestionar si lo que sale es distinto. Si se toma una decisión en el comité federal absolutamente democrática, el grupo socialista debería mostrar coherencia", ha argumentado Fernández. El PSOE podría multar e incluso expulsar a quienes no acataran la disciplina de voto. A la espera de que llegue ese momento, el también presidente de Asturias prefiere "no hablar de una acción de tipo coactivo, sino persuasivo".
La presidenta de Baleares, Francina Armengol, le ha reprochado en la Cadena SER que no se consulte a la militancia sobre el "viraje histórico" que se plantea el partido. Dos de los 10 miembros de la gestora, Francesc Antich y Francisco Ocón, propusieron, sin éxito, que fuera este sábado. "Coser no es imponer; es hablar", ha observado Armengol.
Fernández ha insistido en que el PSOE facilitará la formación de Gobierno, pero que de ahí no pasará. "Es muy difícil que el PSOE vaya a apoyar unos Presupuestos del PP. El mensaje que trasladé al presidente en funciones es que la gobernabilidad está constituida de dos elementos: la investidura y la estabilidad. El PSOE, después de un debate que tendremos el domingo, puede aportar la investidura. Pero Rajoy debe buscar la estabilidad en otros lugares políticos".
Respecto a cuándo tendrá lugar el congreso donde se elegirá al secretario general al que le tocará dirigir un partido "dañado", el presidente de la gestora ha señalado que su objetivo "no es dilatarlo", aunque no ha dado fechas. "El tiempo que debe permanecer la gestora al frente de la organización tenemos que serenar las aguas en el marco del partido y plantear un congreso de reconstrucción. Tenemos que hacer un congreso con ponencias sensatas y debatidas, que traslade un mensaje también a la sociedad. Necesitamos adaptar el partido con su discurso y proyectos a los desafíos que enfrentamos", ha esgrimido.
El presidente de la gestora del PSOE ha responsabilizado a Pablo Iglesias del reciente escrache a Felipe González y Juan Luis Cebrián en la Universidad Autónoma de Madrid. "Si no directamente… ellos [Podemos], y más concretamente Pablo Iglesias, la persona que habló de la cal viva, no solamente los exculpa, sino que se está inoculando en la sociedad ese virus de la intolerancia que trasciende lo político". "Iglesias parece que tiene la posición más radicalizada en el combate por el liderazgo dentro del propio Podemos", ha concluido.
Con información de El País