"La naturaleza parece no darle tregua a nuestro país, pero se han estado desplegando todos los esfuerzos para enfrentar esta situación", dijo hoy la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, en alusión al temporal que el fin de semana dejó tres muertos y 19 desaparecidos en el centro del país.
"En este momento hay 19 personas desaparecidas y 377 aisladas, y se está trabajando intensamente para resolver lo antes posible la situación", indicó la mandataria tras reunirse con varios de sus ministros con el fin de evaluar la situación.
Mientras las autoridades buscan a los desaparecidos, poco a poco se ha ido restableciendo en la capital chilena el suministro de agua potable, cuya interrupción afectó este domingo a cinco millones de habitantes de la región Metropolitana.
"Se han estado desplegando todos los esfuerzos para enfrentar esta situación (…), se ha realizado un seguimiento exhaustivo de la emergencia desde sus inicios y hemos dispuesto los mecanismos que corresponde para hacerle frente", aseguró Bachelet.
Las fuertes lluvias caídas durante el fin de semana en zonas montañosas generaron aluviones y crecidas de ríos en varios puntos de las regiones Metropolitana, Valparaíso y O’Higgins, además de en Antogafasta, norte del país.
Dos de las muertes ocurridas como consecuencia del temporal se produjeron en el Cajón del Maipo, una zona montañosa próxima a Santiago que es muy visitada durante los fines de semana por los excursionistas. La tercera muerte tuvo lugar en la región de O’Higgins, al sur de la capital chilena.
Para el Gobierno, las prioridades en estos momentos son encontrar a las personas desaparecidas, recuperar la conexión con los sectores que están aislados y reponer el servicio de agua potable en Santiago.
El intendente de Santiago, Claudio Orrego, admitió que la capital chilena deberá prepararse para enfrentar nuevos eventos de la magnitud de los aluviones ocurridos el fin de semana en los sectores montañosos adyacentes a la cordillera de Los Andes.
Según las autoridades, el que haya lluvias a 4.500 metros de altura empieza a ser cada vez más normal. Ya ocurrió en 2013 y el año pasado y ahora ha vuelto a suceder.
Por eso, la capital chilena -donde los edificios cumplen con exigentes normas de construcción para enfrentar los terremotos- va a tener que hacer inversiones muy significativas en los próximos años y prepararse para otros fenómenos naturales, aseguran.
El temporal dejó sin agua potable a casi 1,5 millones de hogares de una treintena de municipios de Santiago.
A primera hora del lunes, el servicio había sido restablecido en un 50 por ciento y la compañía de agua estimaba que se restauraría en su totalidad a lo largo de la jornada.
El intendente metropolitano, Claudio Orrego, criticó las medidas implementadas por Aguas Andinas, la empresa encargada del suministro, por "no haber hecho lo suficiente para enfrentar este tipo de situaciones".
Algunos expertos se han sumado a las críticas por la falta de mecanismos para enfrentar eficazmente la emergencia provocada por los aludes
El arquitecto urbanista y académico de la Universidad de Santiago Jonás Figueroa reprochó que la compañía tenga 2.300 millones de dólares de beneficios al año y gaste muy poco en mejorar el servicio. Figueroa también criticó al Gobierno por no obligarles a hacer esas obras.
En tanto, el ingeniero civil y especialista en hidráulica Carlos Reiher recordó que éste es el tercer incidente de precipitaciones en sectores cordilleranos durante los meses de calor, y sólo hay estanques de almacenamiento para nueve horas de suministro.
EFE