El presidente Joe Biden rechaza pronunciarse sobre la imputación de Donald Trump. Cuando salía de la Casa Blanca para dirigirse al estado de Minnesota, el mandatario declaró lo siguiente: "No tengo comentarios sobre eso".
El Político
Tras la insistencia de los periodistas, Biden, en su primera referencia al tema después de que un gran jurado de Nueva York votara el pasado jueves imputar a Trump en una causa relacionada con el pago a la actriz porno Stormy Daniels a cambio de su silencio, declaró que no va a hablar sobre el caso de Trump.
Los problemas legales de Donald Trump acaban de empeorar exponencialmente.
¿Por qué es importante?
Para Biden, no tiene mucho sentido hablar o tratar de sacar provecho de la evolución del caso, que implica un pago a la estrella de cine para adultos Stormy Daniels en vísperas de las elecciones de 2016 que ganó su predecesor, reportó NBCNews.
Biden llegó al cargo prometiendo respetar la independencia de los fiscales. Cualquier cosa que dijera sobre los problemas legales de Trump correría el riesgo de validar el argumento republicano de que él es el cerebro de todo.
Lo que Biden está haciendo en cambio es dirigir una campaña de reelección en todo menos en el nombre.
Aún no tiene director de campaña, ni anuncios de televisión, ni cuartel general para la reelección. Por ahora, Biden no los necesita, dicen sus aliados.
Entre líneas
Biden tiene prácticamente asegurada la nominación demócrata, a pesar de los relativamente bajos índices de aprobación de su trabajo.
"El hecho de que no tenga rival en las primarias, teniendo en cuenta su 38% en las encuestas, la tasa de inflación y que tiene 80 años, es extraordinario", dijo un veterano recaudador de fondos demócrata y partidario de Biden. "¿Por qué ibas a anunciarte cuando has despejado el campo sin hacer ningún trabajo para derrotar a nadie? Podrías esperar hasta junio de 2024 para anunciarlo".
Sin un aparato de campaña formal, Biden está utilizando el poder del cargo para dibujar un contraste implícito entre él y Trump que podría resultar útil si acaban enfrentándose.
A principios de la próxima semana, se espera que Trump sea procesado en Nueva York. Puede esperar una cobertura continua del proceso, así como de cualquier declaración que haga ante el juez, Juan M. Merchan.
En contexto
Biden, mientras tanto, estará en Minnesota, uno de los estados del Alto Medio Oeste que necesita mantener si quiere ganar un segundo mandato.
Visitará una empresa de tecnología de energía limpia y hablará de la legislación que firmó y que inyectará cientos de miles de millones de dólares para que Estados Unidos abandone los combustibles fósiles.
La visita forma parte de una gira por 20 estados que el Presidente, la Primera Dama, Jill Biden, y miembros del Gabinete están llevando a cabo para presentar nuevos programas de creación de empleo y fortalecimiento de la economía.
El viaje pondrá de relieve que "la agenda económica del Presidente está desencadenando un auge de la fabricación y las energías limpias, creando puestos de trabajo bien remunerados y trayendo de vuelta a EEUU las cadenas de suministro de energías limpias", señaló la Casa Blanca en una nota previa al viaje.
As Mississippians comb through the rubble – I know it’s not only the destruction we see all around us.
It’s also the photo of grandmom, the missing wedding ring, your dad’s baseball glove.
We see you. You’re not alone. And we will help you fight through this. pic.twitter.com/hEibO6UnP3
— President Biden (@POTUS) April 1, 2023
En conclusión
La imputación del expresidente Trump es un hecho inédito en la historia de Estados Unidos.
Se trata de un caso que se remontaría a 2006, pero que no vio la luz hasta 2018, cuando la actriz Stephanie Clifford, conocida como Stormy Daniels, señaló que había recibido un cobro de 130.000 dólares a cambio de su silencio por las relaciones sexuales entre Trump y ella.
Tras conocerse la noticia, el exmandatario republicano afirmó, a través de un comunicado, que se trata de una muestra más de la "caza de brujas" a la que es sometido y acusó al Partido Demócrata de Biden de "utilizar la Justicia como arma para castigar a un oponente político".
Esta imputación obstaculiza las aspiraciones de Trump de retornar a la Casa Blanca cuando el pasado mes de noviembre anunció su candidatura a las elecciones presidenciales de 2024.