La crisis económica que enfrenta el gobierno de Joe Biden lo ha obligado a asumir actos quizás imposibles en otro momento, como comprar diésel a Rusia.
El Político
Cuatro petroleros rusos con un total de dos millones de barriles de combustible diésel fabricados de gas natural partieron hacia EEUU para ayudar a mitigar la crisis energética que vive el país norteamericano.
Esto supone la máxima compra de este tipo desde el 2018, informa la agencia Bloomberg citando datos de referencia de la plataforma de seguimiento y análisis de Vortexa.
¿Una Rusia aliada?
Los buques rusos deberían alcanzar la costa estadounidense la semana que viene y ayudarán a contener los precios del combustible que han alcanzado los precios más altos en los últimos 7 años, resaltan desde la agencia.
Rusia está mejor posicionada para suministrar diésel que otras refinerías en Europa debido a su acceso a gas natural barato", según Clay Seigle, director de Vortexa en Houston.
Desequilibrio entre el consumo y la producción
Aunque Estados Unidos es hoy día el mayor productor de petróleo del mundo, todavía produce menos del que consume: 11,4 millones de barriles por día contra unos 20 millones que requiere su economía.
Históricamente, Venezuela proporcionaba a las refinerías estadounidenses petróleo pesado y viscoso.
Tras imponer sanciones al importe desde Venezuela, EEUU lleva varios años incrementando la compra de petróleo y derivados desde Rusia, principalmente de fuelóil pesado, por lo que esta compra de diésel refleja un alto nivel de desesperación, explica Alexander Frolov, director adjunto del Instituto Nacional de Energía de Rusia, citado por el periódico Vzglyad.
Lo que queda claro es que a pesar de las diferencias entre ambos países, a la hora de hacer negocios, esas diferencias desaparecen.