La Casa Blanca quiere surfear la ola de la inteligencia artificial (IA). Se espera que la administración Biden emita una orden ejecutiva para solicitar, a las agencias federales, hacer uso de la nueva tecnología.
El Político
El decreto, que según fuentes se hará público la semana entrante, instruirá la aplicación de la IA en los procesos y operaciones de las oficinas gubernamentales.
De igual modo, se pedirá, a las agencias, el acopio de posibles hallazgos, que luego deberán ser compartidos con el actual Ejecutivo.
Hace tres años, durante la administración del ex presidente Donald Trump, el Gobierno estadounidense dio un primer paso hacia el empleo de la inteligencia artificial.
Como titular de la Oficina Oval, Trump dio luz verde a la orden 13960. Tal decreto buscaba “promover el uso de inteligencia artificial confiable en el Gobierno federal”.
Gracias a esa iniciativa, carteras como el Departamento de Educación o del Tesoro dieron los primeros pinitos en la utilización de la IA.
El primer ministerio creó un chatbot “para responder preguntas comunes sobre ayuda financiera”. La herramienta ha brindado asistencia a 2,6 millones de personas.
Desde el Tesoro, por su parte, dieron rienda suelta a varias iniciativas que se encuentran en desarrollo y que, según se espera, permitirán agilizar las operaciones.
La defensa es, sin embargo, el campo en el que la inteligencia artificial podría exhibir su mayor potencial.
El Departamento de Seguridad Nacional autorizó la ejecución de un proyecto que pretende dar luz a “torres de vigilancia autónoma”.
Las estructuras podrán rastrear e identificar “elementos de interés”, sin la necesidad de un operador ni comprometer vidas humanas.
La Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) trabaja, entretanto, en un asistente que empleará IA para discriminar información pública y detectar amenazas.