El inicio de los Juegos Olímpicos está a tan solo 31 días… y Río de Janeiro está en crisis. La violencia está en aumento y los agentes de policía dicen que no reciben su paga desde hace meses.
El mensaje de la policía a los turistas es claro: no vamos a poder protegerlos.
Agentes de policía del estado descargaron su ira la semana pasada con un cartel en el que se podía leer: "Bienvenidos al infierno" fuera del aeropuerto de Río de Janeiro. "A la policía y a los bomberos no se les paga, quien venga a Río de Janeiro no estará seguro", decía la pancarta.
Y no es solo los turistas están en peligro: los locales están perdiendo la paciencia también.
Esa es la dura realidad de las favelas de Río, según uno de sus residentes. La ciudad se prepara para acoger los Juegos Olímpicos de 2016 en medio de crecientes preocupaciones sobre la brutalidad policial y su capacidad para proteger a la gente.
"Parece que hay una orden (de las autoridades) para atemorizar a la gente para que se mantengan en calma, para que no causen problemas en la ciudad porque los extranjeros no pueden ver que la ciudad es caótica", dijo a CNN Higor da Silva, quien reside en la favela Maré.
"A ellos (la policía estatal) no les importa si hay un niño en medio, disparan a su objetivo".
Funcionarios de seguridad del estado dijeron a CNN que han tomado medidas en los últimos años para expulsar a los agentes que usan fuerza excesiva y afirman que disminuyó el uso de armas pesadas.
El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, dijo a CNN a principios de esta semana que el estado estaba haciendo un trabajo "terrible" en lo que respecta a la seguridad en el período previo a los Juegos".
"Está fallando completamente en su labor de vigilancia y cuidado de las personas", dijo.
Plan de rescate
El estado de Río de Janeiro, que controla la policía militar de la región, emitió una orden ejecutiva solicitando fondos de emergencia del gobierno federal para pagar sus bonos y horas extraordinarias a los agentes.
El rescate de 2.900 millones de reales (unos 850 millones de dólares) se puso a disposición la semana pasada, después de que el gobernador interino Francisco Dornelles dijo que los Juegos podrían ser un "gran fracaso" sin los fondos. Se cree que el pago retroactivo será distribuido esta semana.
"Somos números, nada más", dijo a CNN un oficial que desea permanecer en el anonimato.