Un oficial de policía del estado de Lousiana disparó y mató a un hombre afroamericano tras una confrontación en la ciudad de Baton Rouge, en otro caso de violencia policial con tintes raciales en Estados Unidos.
La autopsia reveló que Alton Sterling, de 37 años, murió el martes por causa de múltiples heridas de bala en el pecho y la espalda en las afueras de un mercado en la capital estatal.
La confrontación sucedió en la medianoche, cuando dos policías acudieron a un llamado anónimo sobre un hombre de camiseta roja que vendía CDs y supuestamente amenazaba a las personas con una pistola. Los oficiales tuvieron una pelea con el hombre y terminaron disparando hasta matarlo.
Los dos policías fueron suspendidos mientras se desarrollaban las investigaciones por el caso, según confirmó el capitán L’Jean McKneely a la agencia AP.
El dueño de la tienda, Abdul Muflahi, relató que uno de los policías primero usó una pistola Taser sobre Sterling mientras su compañero intentaba retenerlo. Cuando Sterling intentó sacarse de encima al segundo policía entonces recibió "de cuatro a seis" disparos y murió.
Si bien no había visto la supuesta pistola de Sterling, Muflahi dijo que sí pudo ver cómo los policías sacaba una de su bolsillo después.
En tanto vecinos de la zona cortaron el tráfico y protestaron por la muerte de Sterling cantando el ya famoso slogan "Black lives matter" (las vidas de afroamericanos importan).
Diferentes casos de afroamericanos muertos en circunstancias dudosas a manos de la policía movilizaron a los Estados Unidos en los últimos tiempos.
Así sucedió con Mike Brown, quien en 2014 murió tras recibir seis disparos luego de un forcejeo con la policía en Ferguson, Missouri . O también Eric Garner, quién murió asfixiado el mismo año por un policía que intentaba controlarlo luego de un altercado en Nueva York.
Según la organización Mapping Police Violence, que monitorea hechos de violencia policial y recopila estadísticas, sólo en 2015 102 afroamericanos desarmados murieron a manos de la policía, un número cinco veces más grande que el de los blancos.
AFP