El muy pronto mandatario estadounidense Joe Biden anunció que enviará una propuesta de reforma migratoria pionera al Congreso en los primeros días de su mandato. La misma abarca brindar la ciudadanía a cerca de 11 millones de indocumentados residenciados en el país.
El Político
Activistas defensores de los derechos de los migrantes declararon al diario Los Ángeles citados por El País de España que han sostenido conversaciones formales y satisfactorias con el equipo de transición de Biden para trazar el plan de reforma.
Explicaron que se trata de un programa que otorgará acceso con celeridad a la ciudadanía a dos grupos protegidos actualmente por alivios temporales de la deportación. El primero el denominado DACA, la acción diferida aprobada por Barack Obama para los llegados en la infancia. Y el segundo el TPS, un estatus de protección temporal que han ido concediendo diferentes gobiernos a indocumentados de países donde se habían producido guerras o desastres naturales. Entre ellos Honduras, Nicaragua y El Salvador.
En los dos casos, a cientos de miles de beneficiarios se les autorizará para trabajar en Estados Unidos, aunque sin acceso momentáneo a la residencia. Y algunos trabajadores esenciales inmigrantes recibirán un trato especial.
Indocumentados en cuenta por Biden
Marielena Hincapié es la directora ejecutiva del National Immigration Law Center Immigrant Justice Fund. Esta es una de las organizaciones que permanece en contacto con el equipo de transición de Biden. Expresó su convicción de que la futura administración no recrudecerá la aplicación de las leyes migratorias a los indocumentados. Muy distinto a la de Barack Obama, en cuyo mandato las deportaciones alcanzaron niveles récord. Hasta el punto tal que ciertos sectores pro inmigrantes lo apodaron “deportador en jefe”.
En su cuenta en Twitter esta organización comentó: "Entre las primeras prioridades por las que vamos a luchar en la nueva Administración Biden-Harris: poner fin al #MuslimBan divisivo y discriminatorio de Trump. Es hora de tirarlo como el resto de las crueles políticas de inmigración de Trump".
Among the first priorities we are going to fight for in the new Biden-Harris Administration: ending Trump's divisive and discriminatory #MuslimBan. Time to throw it out like the rest of Trump's cruel immigration policies. pic.twitter.com/bsnCYXqHiI
— NILC Immigrant Justice Fund (@NILCJusticeFund) January 15, 2021
Hincapié declaró: “Esta noción de implementación estricta de la ley migratoria y de dar a los republicanos todo lo que pedían estaba mal desde el principio”.
Por su parte la vicepresidenta electa Kamala Harris declaró esta semana a la cadena hispana de TV Univisión que al término de la residencia temporal de ocho años, cerca de 11 millones de indocumentados podrán acceder a la green card o tarjeta de residencia. Y que tres años después podrán optar a la ciudadanía definitiva. En el caso de los beneficiarios de DACA y TPS, tendrían acceso directo a la residencia.
En entrevista concedida en días pasados a la cadena televisiva Univisión y reproducida por el diario digital elsalvador.com, la futura vicepresidenta informó que el plan rebajará de 13 a 8 años el proceso para que los inmigrantes puedan aplicar a la ciudadanía estadounidense.
Reforma bienvenida
El programa se considera como como la mayor reforma migratoria desde la aprobada durante el Gobierno de Ronald Reagan en 1986.
Ha sido bien recibido por los grupos que participan en las negociaciones con el equipo de transición. Héctor Sánchez Barba, director de la organización Mi Familia Vota y quien en el pasado fue crítico con Biden, definió la propuesta migratoria como “la más agresiva” que ha visto.
En Twitter comentó: "Estamos listos para construir un sistema de inmigración justo e inclusivo".
We are ready to a build a fair and inclusive immigration system.
The @HispanicCaucus and more than 110 Members of Congress are committed to working together with President-elect Biden to ensure immigration reform is signed into law. #BuildBackBetter ⁰
Read letter here ⬇️⬇️⬇️ pic.twitter.com/19Yhlhc1gP— Hispanic Caucus (@HispanicCaucus) January 14, 2021
Por su parte Jess Morales Rocketto, directora ejecutiva de la organización Care in Action, comentó: “No es solo la reforma migratoria, sino también las órdenes ejecutivas. Nos quedamos completamente anonadados con el plan de inmigración y el nivel de claridad”,