Perú cumplirá con el pago de bonos emitidos hace cuatro décadas durante una dictadura militar de izquierda, señaló el miércoles el gobierno, en respuesta a un tribunal de arbitraje en Nueva York al que acudió uno de los acreedores, el fondo estadounidense de inversiones Gramercy.
"Perú continúa avanzando el proceso para pagar a los bonistas y hace un llamado a que Gramercy respete el proceso aplicable para evitar agravar innecesariamente la controversia", indicó el ministerio de Economía y Finanzas en un comunicado enviado a la AFP.
La "respuesta preliminar" de Perú ante el tribunal neoyorquino se entregó el martes, tras recibir el mes pasado una notificación de arbitraje que inició Gramercy para cobrar unos 1.600 millones de dólares de bonos pendientes de pago.
El arbitraje se realiza bajo una cláusula del Acuerdo de Promoción Comercial (APC) entre Perú y Estados Unidos para la resolución de controversias al que apeló Gramercy.
"Perú es un soberano fiable de buena reputación con respecto a sus bonos soberanos globales, que está implementando un proceso para la resolución histórica y legal de la deuda de bonos de la reforma agraria peruana, en beneficio de todos los tenedores legítimos", detalla la respuesta del gobierno.
El gobierno se comprometió a cumplir con el pago tal como lo resolvió en 2013 el Tribunal Constitucional (TC), máximo foro jurídico en Perú. Pero, según los acreedores, el gobierno presionó al TC para sustituir un fallo que obligaba al Estado a cancelar la deuda por otro que permite pagos fraccionados a largo plazo.
En el comunicado Perú reiteró la acusación contra Gramercy de actividad "especulativa" y de negarse a un compromiso "razonable" en el marco legal peruano, con el fin de perseguir un reembolso en condiciones más favorables "en su intento de obtener ganancias más allá de las que tiene derecho".
Gramercy inició el arbitraje internacional justo antes de las elecciones presidenciales del Perú, que ganó el exfuncionario del Banco Mundial Pedro Pablo Kuczynski.
En octubre de 2015, el vocero de Gramercy, James Taylor, dijo a la AFP que el fondo buscó un acuerdo con Perú, pero no encontró interés en las autoridades.
Los bonos fueron emitidos como compensación en la década de 1970 dentro de un programa de reforma agraria iniciado en 1969 por un gobierno militar de izquierda que expropió tierras para entregarlas a los campesinos con el objetivo de acabar con los latifundios.
Se estima que son más de 500 los acreedores de estos bonos, entre ellos Grammercy, que adquirió parte de ellos a tenedores de bonos locales hace casi una década.
Luego de años de juicio en Estados Unidos, otro país suramericano, Argentina, pagó en abril 9.300 millones de dólares a fondos "buitres" que habían adquirido bonos en default en 2001.
Especializado en los países emergentes, el fondo Gramercy asegura administrar activos por 6.300 millones de dólares.
AFP