Pekín no había registrado infecciones nuevas en las últimas semanas. Sin embargo,en los últimos días contabilizó decenas de casos ligados a un gran mercado mayorista de alimentos, lo que elevó el temor a un resurgimiento de la enfermedad, según difundió lta.reuters
El Político
Un dato a considerar es que la capital está adoptando medidas para intentar detener el brote, como un aumento de los tests. En la noche del domingo, Pekín ordenó a todas las empresas que supervisen cuarentenas de 14 días para los empleados que acudieron al mercado Xinfadi o estuvieron en contacto con alguien que sí acudió.
Se pudo conocer que una cadena de restaurantes que vende los tradicionales fideos de Pekín cerró varias sucursales después de que dos empleados dieron positivo.
Hay que resaltar que en la ciudad no hubo casos nuevos de coronavirus en casi dos meses, hasta que se reportó la infección el 12 de junio. Desde entonces, la cifra se ha elevado a 51, incluidos ocho reportados en las siete primeras horas del domingo.
En ese sentido, la autoridad sanitaria de la ciudad, precisó que el seguimiento de los contactos mostró que todos los infectados trabajaban o compraron en Xinfadi, considerado el mayor mercado de alimentos de Asia, o estuvieron en contacto con alguien que estuvo allí.
En una conferencia de prensa celebrada el domingo, el portavoz de la ciudad, Xu Hejian, señaló que “Pekín ha entrado en una situación de excepción”.
Lo cierto es que el mercado fue cerrado antes del alba el sábado y el distrito que lo alberga se situó en posición de “tiempo de guerra”.
Es de hacer notar que el brote pequinés ya se ha propagado a la vecina provincia nororiental de Liaoning, donde la autoridad sanitaria dijo que los dos casos confirmados el domingo fueron de personas que tuvieron un contacto estrecho con infectados en Pekín.
Al menos 10 ciudades chinas, incluidas Harbin y Dalian, han instado a sus residentes a no viajar a la capital o a reportar a las autoridades si lo han hecho recientemente.
Con información de: lta.reuters