Los fiscales generales de 20 estados de EEUU pidieron a una corte federal que emita una medida cautelar que congele un programa humanitario que concede un parole migratorio a ciudadanos de Haití, Nicaragua, Venezuela y Cuba.
El Político
En un documento judicial, los estados demandantes piden a un juez federal en Texas que pause el programa como medida cautelar mientras la corte decide sobre el caso.
Dicho parole migratorio anunciado por el presidente Biden como parte de una nueva estrategia para disuadir los cruces fronterizos de inmigrantes indocumentados.
Demanda al parole humanitario
A finales de enero, los fiscales generales de una veintena de estados presentaron una demanda solicitando a la corte que se de fin al programa, que permite a los migrantes de cuatro países de Latinoamérica solicitar un permiso para vivir y trabajar legalmente en EEUU, reportó LaOpinión.
Los demandantes argumentan que la decisión del Gobierno de Joe Biden de dar luz verde al programa humanitario fue "arbitraria y caprichosa".
A su vez, aseguran que el programa, que tiene un límite máximo de 30.000 permisos humanitario al mes, supone un gasto de millones de dólares para los estados que tiene que proveer de "servicios a los migrantes".
Demanda "incomprensible"
La demanda está suscrita por los fiscales de estados como Florida, Alabama, Alaska, Arkansas, Idaho, Iowa, Kansas y Kentucky, entre otros, y está dirigida contra el Departamento de Seguridad Nacional y su titular, Alejandro Mayorkas, así como contra las agencias federales encargadas de velar por la seguridad fronteriza y de regular la migración hacia EEUU.
Mayorkas ha defendido el programa, asegurando que ha reducido en un 90 por ciento los cruces irregulares en la frontera y tachó la demanda de "incomprensible".
La Casa Blanca anunció la creación del alivio migratorio para venezolanos en octubre, en medio de una incremento en la llegada de personas de este país, sumido en una crisis política y económica, a la frontera sur con México.
Números del parole
En el mes de enero, unas 11,000 personas de estas cuatro nacionalidades entraron a EEUU bajo este programa, según datos de DHS aportados a DW.
La administración de Biden ha argumentado que el programa, junto con el aumento de las expulsiones de inmigrantes que intentan ingresar sin estar autorizados a EEUU, permitirá al país gestionar mejor los flujos migratorios históricos registrados a lo largo de la frontera sur en los últimos dos años.
“Han bloqueado la reforma migratoria integral y el financiamiento para la seguridad fronteriza, y ahora están tratando de bloquear un programa que ha reducido drásticamente la cantidad de inmigrantes que intentan ingresar ilegalmente al país, al mismo tiempo que proporciona una vía segura, legal y ordenada para la migración de personas que huyen del comunismo o del colapso económico”, dijo la Casa Blanca.
¿Porqué siguen las devoluciones?
Paralelo a los beneficios migratorios, el Gobierno de Biden ha implementado una política de devoluciones en caliente, por medio de una normativa sanitaria conocida como Título 42, que permite a las autoridades migratorias expulsar a México a los ciudadanos de estos países sin darles oportunidad de pedir asilo.
El Título 42, una norma heredada del mandato del expresidente Donald Trump (2017-2021), ha permitido más de 2,5 millones de expulsiones de migrantes desde que entró en vigor en 2020, según datos del International Rescue Committee.