El informe de la ONG de DDHH Safeguard Defenders revela que China está operando al menos 54 "centros de servicios policiales en el extranjero" no declarados como parte de una red global para obligar a los disidentes del régimen de Xi Jinping a regresar a Beijing.
El Político
El informe del organismo refiere que “su verdadero propósito es que el Partido Comunista Chino (PCCh) tome la ley en sus propias manos, sin importar la jurisdicción, y para, en sus propias palabras, ‘tomar medidas enérgicas contra diversas actividades ilegales y criminales que involucran a personas chinas en el extranjero”.
¿Por qué es importante?
"Estas operaciones evitan la cooperación policial y judicial bilateral oficial y violan el estado de derecho internacional, y pueden violar la integridad territorial de terceros países involucrados en el establecimiento de un mecanismo policial paralelo utilizando métodos ilegales", dijo el informe.
Safeguard Defenders afirmó que estas estaciones son probablemente una "fachada" que los funcionarios chinos usan para reprimir a sus críticos en el extranjero mientras administraban las solicitudes administrativas y presionaban a los disidentes para que regresaran.
Another #FoxHunt operation exposed by FBI. Remarkable read. Similar to cases exposed in @SafeguardDefend groundbreaking report #INvoluntaryReturnshttps://t.co/GHaLT19d6x pic.twitter.com/0bOrHsfssG
— Peter Dahlin (@Peterinexile) October 24, 2022
En principio, el régimen chino rechazó las afirmaciones de que se trataba de estaciones de policía secretas e insistió en que los puestos de avanzada se utilizaron para disuadir el "fraude transnacional" y brindar servicios diplomáticos a los ciudadanos chinos que viven en el extranjero.
Estas comisarías ilegales se presentan como ventanillas únicas para los chinos en el extranjero, que ofrecen asesoramiento legal, procesamiento de documentos y ‘líneas directas’ a la policía en China.
Europa tiene la mayor concentración de centros policiales
Europa tiene la mayor concentración de centros policiales no declarados del mundo. Varios gobiernos occidentales ya reaccionaron a los informes y comenzaron investigaciones en ciudades como Londres, Glasgow, Nueva York, Ottawa, Dublin, Madrid, Amsterdam, Rotterdam y Sidney.
En ese sentido, el ministerio de Relaciones Exteriores holandés afirmó que se encuentra investigando la posible existencia de dos “comisarías ilegales” que posee China y que operan en los Países Bajos, cuyo objetivo es el de monitorear y hostigar a los disidentes del régimen comunista de Xi Jinping.
La información llego a través de una investigación que llevaron adelante diferentes periodistas holandeses tras recibir numerosas denuncias por parte de miembros opositores de la comunidad china en Holanda.
“What is correct is that the Chinese government never informed us about the centers via diplomatic channels, so that makes them illegal to begin with,” Dutch Foreign Ministry spokesperson Maxime Hovenkamp said on Wednesday.https://t.co/utEFEEirOf
— Safeguard Defenders (保护卫士) (@SafeguardDefend) October 28, 2022
De acuerdo a las investigaciones, dichas “comisarías” han estado operando en Ámsterdam y Rotterdam al menos desde el año 2018 sin la autorización del gobierno Holandés, que tampoco fue notificado al respecto por parte del gobierno asiático.
Del mismo modo, los informes revelaron que las instalaciones estarán dedicadas a favorecer el trabajo de la policía china en el exterior, que consiste en recolectar información y amenazar a aquellos disidentes chinos que viven en Países Bajos y se muestran contrarios al régimen del mandatario Xi Jinping. Utilizando a ex militares y oficiales de inteligencia como empleados.
Italia albergaba el segundo mayor número de comisarías de Europa, con cuatro: Roma, Milán, Florencia y Prato.
En Francia, tres centros de servicio operaban desde París. Portugal también albergaba uno en Oporto, Lisboa y Madeira. En el Reino Unido, el informe detectó dos en Londres y uno en Glasgow.
Los Países Bajos albergaban dos centros de este tipo en Ámsterdam y Rotterdam, respectivamente, mientras que la República Checa tenía dos en Praga. Budapest (Hungría) también contaba con dos, uno para cada una de las comisarías de Fuzhou y Qingtian, un fenómeno común en toda Europa.
Like what you see about our work on China's illegitimate overseas police stations? Why not work for us?
We're hiring! #HumanRightsJobs
?https://t.co/DbxJsGnp1q pic.twitter.com/VTW70DwcgE— Safeguard Defenders (保护卫士) (@SafeguardDefend) October 28, 2022
Entre los países europeos que sólo contaban con una comisaría de policía china estaban Dublín (Irlanda), Bratislava (Eslovaquia), Fráncfort (Alemania), Atenas (Grecia), Estocolmo (Suecia), Viena (Austria), Odessa (Ucrania) y Belgrado (Serbia).
En África, Benin City (Nigeria), Maseru (Lesotho) y Dar es Salaam (Tanzania) albergaban uno cada uno.
En Asia, al menos un centro policial funcionaba en Ulán Bator (Mongolia), Sirdaryo (Uzbekistán), Bandar Seri Begawan (Brunei), Tokio (Japón) y Phnom Penh (Camboya).
El informe de septiembre de Safeguard Defenders, titulado 110 Overseas, señala que las cifras de fuente abierta representan una lista parcial de actividades vinculadas únicamente a las dos oficinas de policía, y que probablemente haya muchas más asociadas a la policía de otras grandes ciudades chinas.
Presencia en América del Sur
En América del Sur, estas bases ilegales estarían en Buenos Aires, Viña del Mar, San Pablo, Río de Janeiro, Guayaquil y Quito.
Según el informe, la “comisaría” ilegal establecida en la capital argentina sería administrada por la Oficina de Seguridad Pública del condado de Fuzhou (provincia de Fujian).
Dicha comisaría es parte de la red denominada “110 estaciones de servicio en el extranjero”, en referencia al número de emergencia de la policía china e inspiran el título de esta investigación.
Grateful to see global interest in our #110Overseas investigation on the PRC’s clandestine police stations around the world.
For more background re China’s national legal framework for these policing operations & stories of those “persuaded to return” ? https://t.co/uLrAAlYe6W pic.twitter.com/cWwaaCnJfI
— Safeguard Defenders (保护卫士) (@SafeguardDefend) October 26, 2022
Un programa piloto dirigido por las oficinas de seguridad pública de los condados de Fuzhou y Qingtian -de las provincias costeras de Fujian y Zhejiang, respectivamente- había establecido 54 "centros de servicio policial en el extranjero" en cinco continentes, 25 ciudades y 21 países hasta el 21 de junio.
Así lo reveló la ONG española Safeguard Defenders, reportó NewsWeek.
Entre líneas
Los centros de servicio en el extranjero se crearon en nombre de la lucha contra la delincuencia transnacional, especialmente el fraude en las telecomunicaciones, que ya ha supuesto la detención de un gran número de ciudadanos chinos residentes en el extranjero.
Safeguard Defenders documented video evidence coercing a suspect in Madrid to return to China. The man “was approached in Spain, ‘educated’ by staff of the Madrid overseas service station and brought into a teleconference with officials back in China.
https://t.co/c9826bxQ8S— Safeguard Defenders (保护卫士) (@SafeguardDefend) October 27, 2022
Sus tareas declaradas incluyen también la prestación de servicios administrativos, como la renovación de los permisos de conducir chinos, según el informe.
Safeguard Defenders afirmó que las tácticas policiales de China eran problemáticas, ya que se dirigían a los sospechosos sin establecer firmemente los vínculos con el delito ni respetar las garantías procesales en los países de acogida, principalmente coaccionando a los familiares de los presuntos fugitivos como medio de "persuadirlos" para que regresaran por su cuenta.
Entre abril de 2021 y julio de 2022, las autoridades chinas detuvieron a 230.000 sospechosos por esta vía, la mayoría procedentes del sudeste asiático, según la ONG.
At least 4 countries, including #Canada and #Spain, are probing offices operated by #Chinese law enforcement agencies in their territories, after our report exposing China's network of undercover police stations. https://t.co/utEFEEirOf
— Safeguard Defenders (保护卫士) (@SafeguardDefend) October 28, 2022
En EEUU, los datos de fuente abierta del informe indicaban un centro de servicios de este tipo en la ciudad de Nueva York. En Canadá, se establecieron tres en Toronto.
En conclusión
La ONG alertó que un factor más preocupante de las operaciones policiales chinas en suelo extranjero es que Pekín se dirige a disidentes políticos y a otras personas susceptibles de ser perseguidas una vez que se les "persuade" para que regresen a su país..
La "persuasión para el retorno" permite a las autoridades saltarse el protocolo jurídico, como la protección del derecho del objetivo a un juicio justo, dijo.
Abandonando cualquier pretexto de garantías procesales o la consideración de la inocencia de los sospechosos hasta que se demuestre su culpabilidad, la selección de los hijos y familiares de los sospechosos en China como "culpables por asociación" o "daños colaterales", y el uso de amenazas e intimidación para perseguir a los sospechosos en el extranjero, se está convirtiendo en un problema endémico", afirmó.
在 #中国 的精神病监禁当中,当工作人员推出ECT机器时,患者会惊恐地哭泣。他们知道他们将被迫观看其中一位病患被绑在床上、并在电流开关打开时不受控制地强烈抽搐痉挛。https://t.co/NbzBfOURBm pic.twitter.com/zNqTXQoq3U
— Safeguard Defenders (保护卫士) (@SafeguardDefend) October 13, 2022
"Tanto si los objetivos son disidentes, funcionarios corruptos o delincuentes de bajo nivel, el problema sigue siendo el mismo: el uso de métodos irregulares -a menudo combinando zanahorias con palos- contra la persona objeto de la persecución o los miembros de su familia en China socava cualquier proceso debido y los derechos más básicos de los sospechosos", concluyó Safeguard Defenders.