Una jueza interina de Panamá fue despedida del cargo porque no ordenó la detención preventiva de cuatro costarricenses vinculados a un decomiso de 500 kilos de cocaína, quienes ahora están en paradero desconocido, informó hoy la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
El pleno, de nueve magistrados, dejó sin efecto el nombramiento interino de Mixila Méndez como juez de Garantías en el Circuito Judicial de Chiriquí, provincia occidental fronteriza con Costa Rica, indicó este viernes un comunicado de la máxima corte de Panamá.
La decisión, recogida en el acuerdo 541 del 29 de septiembre de 2016, "le reconoce a la ahora ex juez de Garantías (interina) todas sus prestaciones laborales a la que tiene derecho y le advierte expresamente que esta decisión puede ser objeto de recurso de reconsideración", de acuerdo a la información judicial.
El despido deriva de que en una audiencia celebrada el pasado 25 la jueza interina no ordenó la detención preventiva de los costarricenses, sino que les aplicó medidas cautelares, entre ellas la prohibición de abandonar la provincia de Chiriquí y residir en un lugar de hospedaje ocasional, sin asignarle custodia policial aún cuando sabía que no tenían arraigo en Panamá.
Los cuatro costarricenses debían presentarse el pasado 27 en una audiencia de apelación pedida por la Fiscalía, pero no lo hicieron "y hasta ahora se desconoce su paradero", agregó la información judicial.
El fiscal de drogas del Tercer Distrito Judicial, que incluye a Chiriquí, Carlos González, explicó entonces que los cuatro costarricenses fueron declarados "en rebeldía" por el juzgado con la finalidad de ordenar su detención y comparecencia ante la Justicia.
Los cuatro costarricenses, cuyas identidades no han sido reveladas, estaban a bordo de una embarcación de ese país en la que se encontraron 500 kilos de cocaína, al sur de Punta Burica, en la provincia de Chiriquí y a unos pocos kilómetros de Costa Rica, de acuerdo a la información oficial.
Con información de EFE