Los líderes del principal partido de la oposición en Puerto Rico expusieron este domingo las propuestas que han presentado a la Junta de Control Fiscal impuesta por Washington para supervisar la Administración de la isla y sus cuentas públicas, sin perder de vista su objetivo prioritario de la "estadidad".
En una conferencia de prensa, el candidato a la gobernación y a la comisaría residente por el Partido Nuevo Progresista (PNP), Ricardo Rosselló y Jenniffer González, respectivamente, explicaron que esas medidas buscan promover el desarrollo económico, la creación de empleo y la eficiencia gubernamental.
En su opinión, lo primero debe ser renegociar "de buena fe los términos de la deuda" para poder pagarla y "recuperar nuestra credibilidad".
Luego, proponen reestructurar el Gobierno, crear una ley de transparencia gubernamental, eliminar impuestos especiales sobre las mercancías que entran y salen de la isla, cancelar la doble imposición como parte del acuerdo tributario entre España y EE.UU. y aumentar la participación de las compras del Gobierno federal de bienes y servicios en proveedores domiciliados en Puerto Rico.
Otras medias están encaminadas a igualar las ayudas públicas que reciben los puertorriqueños y otros estadounidenses, incluidas las coberturas en sistemas públicos de salud, hacer permanente la deducción contributiva por producción doméstica a compañías de otros estados que produzcan en Puerto Rico y autorizar al Departamento del Tesoro a garantizar bonos y notas de Puerto Rico.
También, ampliar el Programa Suplementario de Asistencia Nutricional, incluir a Puerto Rico en el Programa de Asistencia Temporal para Familias con Necesidades e incluir a la isla en todas las encuestas y estudios demográficos realizados por las agencias federales.
En cuanto al presupuesto aprobado para el año fiscal 2016-2017, que comenzó el pasado julio, los líderes del PNP piden a los federales que lo analicen detalladamente, porque creen que es "inconstitucional" ya que no incluye una partida para el pago de la deuda.
"Es vital que como primera iniciativa se enmiende este presupuesto, lo que será el primer paso para comenzar a recuperar la credibilidad del Gobierno", dijo hoy Rosselló.
Añadió que la junta debe "hacer una evaluación profunda de los 340 servicios que actualmente ofrece el Gobierno y de la estructura de 118 agencias para determinar cuáles de estos servicios se pueden consolidar, eliminar o delegarse en el sector privado".
Según dijeron, todas estas medidas buscan que Puerto Rico "obtenga la igualdad con los demás estados de la nación americana consiguiendo la estadidad" (la anexión a EE.UU. como un Estado más).
Al respecto, el líder del gobernante Partido Popular Democrático (PPD), David Bernier, dijo en un comunicado que "la estabilidad fiscal y socioeconómica tiene que ser la prioridad para Puerto Rico", por lo que a su juicio "es lamentable que aún el presidente del PNP no lo haya entendido y vuelve nuevamente a insistir en el juego político".
"Antes de pensar en la estadidad, Puerto Rico tiene que resolver su situación fiscal. Hoy vemos nuevamente cómo el candidato nuevo progresista, de forma irresponsable, presenta una idea para, y cito: "iniciar la transición hacia la estadidad", señaló Bernier, candidato a la gobernación por el PPD.
Con información de EFE