Entre el otoño de 2022 y lo que va del verano de 2023, unos 100.000 migrantes en busca de refugio han llegado a la ciudad de Nueva York.
El Político
La mayor parte de los solicitantes de asilo arribaron a la denominada “Capital del Mundo”, luego de ingresar, de forma ilegal, al territorio de Estados Unidos.
Los indocumentados, que entraron a suelo estadounidense a través de la frontera sur, obligaron a la oficina del alcalde Eric Adams a abrir unos 200 refugios de emergencia.
Pese a los esfuerzos del gobierno local, los albergues han empezado a llegar a un punto de saturación.
Los lugares de alojamiento se han convertido, de esa forma, en centros de hacinamiento.
Ante tal realidad, familias enteras se apegan, cada vez más, al plan que ha ideado la gobernadora Kathy Hochul.
Se trata de un programa que pretende movilizar a más de 1.200 grupos familiares hasta residencias temporales.
Las viviendas sólo son asignadas si las familias han formalizado sus solicitudes de asilo y permisos de trabajo.
De momento, 17 núcleos familiares han manifestado su voluntad de moverse desde refugios hasta residencias que serán alquiladas por el estado de Nueva York.
Según el plan, las autoridades estadales se comprometen a pagar la renta de los solicitantes de asilo hasta por un año.
Para cumplir con esa promesa, Nueva York desembolsará 25 millones de dólares.
El programa también comprende asistencia a las familias con la inscripción escolar, la atención médica y otras necesidades.